Proyecto delicado y elegante, liderado por el pianista y compositor cubano Pepe Rivero y la cantante ibicenca Ángela Cervantes, con el que rememoran el legado de la inmensa artista puertorriqueña Sylvia Rexach.

Pepe Rivero forma parte de una “nueva generación” de músicos cubanos que han irrumpido en la escena internacional del jazz.

Después de terminar sus estudios de piano en La Habana, en los cuales recibió formación clásica, su vocación le condujo al jazz.

Ángela Cervantes empieza a cantar siendo niña en el hotel donde se crió, en la Ibiza de los 80-90. Entre canciones e historias de ultramar comprende que la música es su pasión y su forma de descubrir el mundo, más allá de los límites del mar. Un día de 1999, toma un barco rumbo a Barcelona para formarse en danza,

interpretación y música.

Pepe Rivero - piano/arreglos

Ángela Cervantes - voz

Ariel Bringuez - saxos tenor y soprano

Reinier Elizarde “El Negrón” - contrabajo

Michael Olivera – batería