«Pagamos los cargos que conlleva ir a un sistema sostenible»

Este futuro verde y menos contaminante que se nos acerca, ¿es más caro?

La transición será cara y de hecho es lo que está pasando. Estamos pagando los cargos que conlleva ir hacia un sistema más sostenible y más soberano que evitará que seamos dependientes de los productores de los combustibles fósiles.

¿Para cuándo se prevé que acabe este período de transición?

La meta de la descarbonización está fijada en el año 2050, aunque se prevé que se acelere a partir del 2035 con la prohibición, por ejemplo, de vehículos de combustión interna.

Estamos en una época en la que el precio de la electricidad está por las nubes, ¿qué dicen las previsiones?

A partir de abril de 2022 se normalizará y retornaremos a los precios que teníamos antes de esta escalada.

¿Qué pasará en los meses de pleno invierno cuando haya más demanda de energía?

Si las previsiones se cumplen los precios serán mucho más caros porque en invierno hay más consumo de electricidad y de gas en el norte de Europa. La apertura de un gaseoducto que está en construcción ayudará a paliar esta situación ya que puede llegar el caso de que no haya suficiente gas para satisfacer la demanda energética.

¿Cómo afecta la escalada de precios a distribuidoras como U Energia?

Nosotros compramos la energía antes de venderla basándonos en unas previsiones. Estas subidas provocan a las empresas un estrés de caja y se reducen los márgenes de beneficios.

¿Nos está pasando factura el hecho de que nos hayamos puesto tarde con las energías renovables?

El problema reside en que se ha elegido el gas como materia prima de respaldo cuando las plantas solares o eólicas no producen energía. Esto será así hasta que no podamos disponer de baterías de gran capacidad o el hidrógeno como combustible. Después está la tecnología nuclear. Tiene muy mala fama pero es 100% neutra en emisión de carbono. Es una fuente de energía limpia que está a la misma altura que la eólica.

¿Entonces harían falta más centrales nucleares?

Ahora hay un debate en Europa. Alemania las cerró por decisión política y en su lugar queman carbón para producir energía. Al final, queremos ser tan limpios y después resulta que no lo somos tanto si recurrimos otra vez al carbón por no usar la energía nuclear. Esta energía sería un buen respaldo a la eólica o la solar porque es muy estable en el tiempo y barata.

¿El futuro pasa por el autoconsumo y las placas solares?

La generación distribuida de energía es el futuro. Además de producir tu electricidad se puede verter el excedente de producción a la red. Si consiguiéramos cubrir los tejados con placas, la producción de energía sería muy importante.

¿Qué es U Energía? Explíquenos algo de su historia.

Es una empresa de multiservicios heredera de El Gas, una sociedad nacida en Sóller en 1892. Se dedica a comercializar energía, a las telecomunicaciones, somos una empresa de ingeniería y actores en el desarrollo de la instalación de puntos de recarga para vehículos eléctricos. Nuestra filosofía es intentar hacer las cosas bien y cuando uno lo intenta tiene la suerte de que le sale como lo ha concebido.

Ustedes han pasado de ser una empresa estrictamente local a dar el paso y ser nacional. ¿Cómo se hace eso?.

Uno se da cuenta de que quedándote en el ámbito territorial donde uno siempre se ha movido la empresa no puede crecer y, además, ves que la competencia se hace un hueco en el mercado donde uno ha estado toda la vida. Nos dimos cuenta de que de seguir así nos encontraríamos con una muerte a medio plazo. Decidimos dar el paso y poc a poc hemos ido creciendo y nos hemos ido haciendo grandes.

¿Cómo ha crecido la empresa que usted dirige?

En los dos últimos años hemos crecido un 50% en número de clientes y un 90% en facturación, cosa que nos satisface porque vemos que los ciudadanos han confiado en U Energia. Y no solo el cliente tradicional de toda la vida como tenemos en Sóller, sino también todos aquellos que lo han hecho más allá del valle. Somos una alternativa al resto de empresas del sector.