Los presidentes de las asociaciones Taxis-PIMEM y de transportistas de viajeros de Balears (microbuses), Gabriel Moragues y Juan Gorreta respectivamente, han defendido hoy ante los representantes del Govern, del ayuntamiento de Palma y del aeropuerto de Son Sant Joan el pacto que han alcanzado para evitar nuevos enfrentamientos entre ambos colectivos en estas últimas instalaciones.

La reunión, celebrada en la conselleria de Movilidad, se ha saldado con la decisión de que el pacto entre taxistas y microbuses será trasladado a la Comisión de Intrusismo en el transporte, donde se abordan también las campañas de inspección que se desarrollan en el aeropuerto, con el fin de determinar su viabilidad con la legislación balear.

Buenos resultados

Gabriel Moragues ha puesto en valor el resultado que se está obteniendo con la aplicación de ese acuerdo, que supone que los grupos de menos de cinco personas se destinan al taxi, mientras que los de cinco o más pueden elegir entre contratar un microbús y varios autotaxis, sin que se intente captarlos en el interior de la terminal.

El presidente de la sectorial de PIMEM ha indicado tras la reunión convocada por el director general de Movilidad, Jaume Mateu, que desde que se puso en marcha este sistema no han vuelto a registrarse tensiones entre ambos colectivos, y que la situación actual es mucho mejor que la que se daba anteriormente, una afirmación defendida igualmente por Juan Gorreta.

Pese a que no se oculta que esta fórmula puede suponer una ilegalidad (la normativa prohíbe que los microbuses de transporte discrecional sea contratados fuera de las oficinas de la empresa), Moragues ha insistido en la necesidad de ser realista a la hora de mantener la paz en Son Sant Joan.