Baleares ha alcanzado la tasa de paro administrativo más baja de toda la serie histórica en un mes de abril, con un 5,3%, lo que supone una situación que roza el pleno empleo sin haber entrado todavía en la temporada alta. Los 31.011 desocupados contabilizados durante el mes pasado no solo suponen una reducción del 26% en relación a las mismas fechas del pasado año, la más acentuada del país (la media española es de un 7,7%), sino que para encontrar una cifra absoluta tan baja de desempleados hay que remontarse a 2001.
Del mismo modo, el número de personas con empleo afiliadas a la Seguridad Social se situó en 552.291, de nuevo un récord histórico para un mes de abril, con un crecimiento interanual del 6,5%, el mejor dato de toda España, cuya media ha sido un alza que roza el 3%.
Estas cifras explican la satisfacción expresada por el conseller de Trabajo, Iago Negueruela, y el director general de Modelo Económico, Llorenç Pou, durante la presentación del citado informe de coyuntura laboral, con una situación que fue calificada de «extraordinaria», vinculada además a una prolongación de la temporada turística que durante este año se espera que se mantenga hasta octubre.
El conseller hizo especial hincapié en que los datos de paro administrativo (el de los registrados en las oficinas de empleo) suponen que las islas pueden vivir una situación próxima al pleno empleo durante ocho meses del año, algo que no sucede en ninguna otra autonomía, una tendencia que en su opinión se está convirtiendo en estructural.
Fijos discontinuos
Volviendo a la cifra de personas con un puesto de trabajo, hay que destacar el impulso que ha alcanzado el llamamiento de los trabajadores fijos discontinuos, que en abril fue de 33.001, sumando ya un total de 84.209 durante los cuatro primeros meses del año, una cifra que no tiene precedentes.
Sobre este punto, Iago Negueruela apuntó que lo expuesto refleja que las empresas prefieren mantener su plantilla completa durante más meses para evitar perder a trabajadores que puedan irse a otras durante periodos de inactividad.
Los 552.291 afiliados a la Seguridad Social contabilizados en abril, además de implicar el aumento antes señalado del 6,5% respecto a las mismas fechas de 2022, suponen también un crecimiento del 11,9% en relación al pasado marzo, e implica que Baleares ha creado uno de cada cuatro nuevos puestos de trabajo en España. El aumento medio estatal ha sido de un 1,2%.
Por sectores, es especialmente relevante el aumento interanual del empleo de un 12,9% en la hostelería, del 7% de la construcción, y del 4,9% del comercio.
Calidad del empleo
Otro aspecto subrayado por Negueruela y Pou fue es de la calidad de empleo, ya que ocho de cada diez contratos firmados en abril fueron indefinidos, cuando antes de la reforma laboral esa proporción era de dos de cada diez. Eso ha situado la tasa de temporalidad de las islas en un 10,5%, por debajo del 15,4% estatal. En 2019 esa tasa balear era del 32,2%.
En cuanto al paro, los 33.011 desempleados de abril, además de suponer una reducción del 26% respecto a las mismas fechas de 2022, implican un recorte del 8,1% en relación a marzo de este año, también la caída más acentuada de España.
Un dato a remarcar es que ese descenso interanual del 26% no solo es el más notable del país, sino que incluso más que duplica la segunda bajada más acentuada, como es el 11,4% de Extremadura.
El desempleo de los jóvenes se sigue reduciendo a un ritmo superior a la media, con un 34,1% en el caso de los menores de 25 años.
Por sectores, la rebaja del paro en la hostelería es la más acentuada, con un 40%, mientras que en la construcción ese porcentaje ha sido del 26,3%. En el comercio se ha bajado un 25,9%.
En cuanto al desempleo de larga duración (más de 12 meses sin encontrar trabajo), se ha reducido un 20,3%, lo que deja a 12.335 personas en esa situación.
Por islas, Mallorca muestra la rebaja del paro más moderada, de un 23,7%, frente al 36,5% de Menorca, el 37,2% de Eivissa y el 44,6% de Formentera.
Reacciones
La patronal CAEB ha destacado que las islas siguen rebajando sus niveles de desempleo, aunque ha advertido de una «ralentización» en esa tendencia pese al «empujón de la Semana Santa». En este contexto, su presidenta, Carmen Planas, ha señalado la «valentía empresarial» a la hora de seguir contratando.
Por su parte, desde la federación PIMEM se han valorado de forma positiva los datos de empleo, pero ha advertido de los problemas que se avecinan debido a la escasez de mano de obra, una situación que ya se vivió en 2022.
Desde UGT se ha puesto de relieve que las islas no tienen un problema de empleo, a la vista de los datos de abril, sino de condiciones de trabajo, por las cargas que se asumen, y se ha insistido en la necesidad de subir salarios.
El incremento de los puestos de trabajo también es puesto de relieve desde CCOO, que hace hincapié en que esta mejoría se produce «pese a los augurios interesados de los que quieren crear un clima de pesimismo».
