Satisfacción. Eso es lo que transmitió ayer el Govern tras la reunión con la cúpula de Iberia en el Consolat de Mar. La presidenta, Francina Armengol, celebra que sus dos demandas se garantizan tras la compra de Air Europa: los empleos y la conectividad. Así se lo transmitió el presidente de Iberia, Javier Sánchez-Prieto. Si Bruselas da el visto bueno en dieciocho meses a la «operación proconsumidor», defiende el directivo de International Airlines Group (IAG), continuará la actividad de la compañía todavía en manos de Globalia. Garantiza que el «compromiso» con los trabajadores en Baleares «no tiene fecha de caducidad».

Sánchez Prieto acompañado por el presidente de Iberia Express, Carlos Gómez Suárez, y el director corporativo de la corporación Juan Cierco, se reunió con Armengol y el portavoz del Govern, Iago Negueruela en el Consolat de Mar. Justo una semana después del encuentro con los directivos de Air Europa en el mismo escenario. Entre las dos compañías suman 3.500 trabajadores en el archipiélago.

Armengol transmitió «tranquilidad» y aseguró que con Air Europa dentro del conglomerado de IAG (la matriz de Iberia, Vueling, British Airways, Air Lingus y Level) la compañía que lidera Sánchez-Prieto «no sumará sino que multiplicará» en Baleares su conectividad y capacidad aérea. Se garantizan los contratos de trabajo cinco años con Air Europa en la sede de Llucmajor y siete en el caso del servicio de handling (asistencia en tierra). «No lo has podido explicar mejor, presidenta», le replicó el presidente de Iberia.

Más plazas aéreas

«Para nosotros Baleares es uno de nuestros mercados naturales más importantes», arrancó Sánchez-Prieto, por tanto «es relativamente sencillo garantizar que la conectividad va a seguir mejorando» y con la compra de Air Europa «si acaso, todavía más». En la última década el grupo Iberia ha multiplicado «por tres» las plazas aéreas en las islas. En 2023 tiene programados 1,6 millones (un 31 % más que en 2019). «Nuestro compromiso con el empleo es también muy natural», prosiguió. Al millar de trabajadores del grupo se sumarían más de 2.500 de Air Europa.

El presidente de Iberia asegura que continuarán con «la actividad» de Air Europa y «los contratos de Globalia forman parte de esta operación». De ahí su «compromiso con las oficinas de Llucmajor» y sus «actividades», el handling y el mantenimiento de aeronaves.

«No habrá rutas en que la competencia empeore» por la mediación de Bruselas, sostiene el directivo

«Nosotros defendemos que esta es una operación proconsumidor», sostiene, y Bruselas garantizará que «no haya rutas en los que la competencia empeore». Alude a que en caso de conflicto tendrán que ceder rutas o incorporar a un tercer competidor. «La conectividad mejorará» y con la mediación de Bruselas no habrá rutas «en que la competencia empeore».

Conflicto de rutas

Sobre su afirmación la semana pasada de que habría conflicto con rutas de Baleares, lo descartó. «Era un ejemplo, no hay todavía ninguna ruta concreta, el proceso empezó el viernes y es largo». Eludió señalar con qué aerolíneas negocian la cesión de rutas. «Hay contactos con algunas», pero prefiere que se mantenga de forma «confidencial» por ahora.

En cuanto al nuevo concurso público de Aena para los servicios de asistencia en tierra a terceros (incluye los de Son Sant Joan), el directivo que sustituyó a Luis Gallego tras su ascenso a CEO de IAG explicó que antes del verano se conocerán los resultados para los próximos siete años. Tanto Iberia como Groundforce, división de handling de Globalia, confían en mantener sus licencias. «Vamos a necesitar ese servicio para los aviones de Air Europa si forma parte de Iberia», añadió. «Insisto, el compromiso» con los empleos en Baleares «no tiene fecha de caducidad».