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Baleares, única comunidad autónoma que no ha hecho el registro de sanitarios objetores a la eutanasia

A punto de cumplirse dos años de la nueva prestación, el listado de profesionales reacios a hacerla es inminente, aseguran en la Conselleria

Baleares, única comunidad autónoma que no ha hecho el registro de sanitarios objetores a la eutanasia

Esta comunidad autónoma a diferencia de las dieciséis restantes carece aún de un registro en el que tanto médicos, psicólogos, enfermeros o farmacéuticos puedan declararse objetores de conciencia a la aplicación de la ley de la eutanasia que, cómo se recordará, entró en vigor en junio de 2021.

Según una información publicada en el diario El País, en el resto de comunidades autónomas se han apuntado en los diferentes registros para la objeción a la ley de eutanasia un total de 9.384 profesionales, cifra que aunque parezca elevada supone tan solo el 1,3% de los 700.000 profesionales que podrían acogerse a ella entre médicos, psicólogos, enfermeros o farmacéuticos.

En cifras absolutas que no contemplan el número de sanitarios que trabajan en cada comunidad autónoma, Madrid, con 3.119 objetores apuntados, Aragón, con 1.077, y Andalucía, con 1.051, copan el podio de las tres CC AA con más sanitarios reacios a participar en una eutanasia.

Desde la conselleria de Salud argumentaron para no tener finiquitado este registro que su creación fue aprobada en Consell de Govern el pasado mes de noviembre cuando también se publicó en el BOIB. Desde entonces se ha trabajado en su puesta en marcha y su creación ya es inminente, aseguraron. 

Matizaron desde Salud que este registro de objetores «no tiene carácter público y se somete a principios de confidencialidad estricta. La inscripción y la baja son voluntarias y se pueden solicitar en cualquier momento».

Su finalidad se limita por tanto a garantizar el derecho de los objetores a registrarse como tales y poder acreditar así su condición de profesional sanitario contrario a participar en la eutanasia. 

«No tiene una finalidad estadística, no está pensado para saber cuántos profesionales se declaran objetores ni quienes son, sino únicamente para que se puedan gestionar sus peticiones para figurar como tales», abundaron.

Aunque de manera la previa la conselleria de Salud se ha cerrado en banda a ni tan siquiera facilitar el número de profesionales que reclamen figurar en el registro, no explicaron los motivos por los que el resto de CC AA no han tenido ningún problema en hacer pública la cifra de sus objetores.

Se ha podido ejercer

El portavoz del Govern, Iago Negueruela, informó efectivamente de la creación de este registro tras la reunión del Ejecutivo autónomo del pasado 21 de noviembre y apuntó a que pese a no confeccionado el listado de objetores, la negativa a participar en un proceso de eutanasia se había podido ejercer sin problemas.

Tras cumplirse el primer año de la prestación en junio, Salud informó de que ocho personas, cuatro hombres y cuatro mujeres residentes en Mallorca y las Pitiüses, habían recibido la eutanasia. El balance anual reflejó que se habían recibido 17 peticiones de las que se aceptaron 13 aunque finalmente se llevaron a cabo las citadas 8 por diferentes circunstancias. Los datos del segundo año se facilitarán el próximo mes de junio cuando se cierre el ejercicio.

Al presentar estos datos, el entonces director del IB-Salut Juli Fuster se congratuló de «no haber tenido ningún problema con la objeción de conciencia» al tiempo que revelaba que hasta 600 profesionales habían sido formados para dar la eutanasia, algunos de ellos de la sanidad privada o de residencias de ancianos.

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