Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

José Manuel Caballol, director general de Hogar Sí: «Compraremos pisos a quienes nos los quieran vender a un precio razonable»

La ONG planea adquirir cerca de cien viviendas en Mallorca a través de una socimi para alquilar a personas sin hogar: «Es la fórmula más lógica»

José Manuel Caballol. | HOGAR SÍ

Hogar Sí ha dado la vuelta al proceso de ayuda a personas sin hogar. «Queremos transformar el sistema de atención a, que mayoritariamente está basado en albergues y alojamientos colectivos, y sustituirlos por viviendas», introduce José Manuel Caballol.

Ya aplican el método ‘housing first’ en Mallorca. ¿Cómo funciona?

Tenemos alquiladas más de cien viviendas en la isla, la mayoría en Palma. Las alquilamos a particulares y las cedemos a personas sin hogar utilizando la fórmula del comodato, que permite ceder el uso de la vivienda sin una contraprestación económica. Pero tratar con cien caseros nos genera una serie de inconvenientes, como es fácil imaginar. Y pagamos a los particulares una barbaridad, entre 900 o 1.100 euros. Ese dinero sale mayoritariamente de ayudas públicas.

Y ahora proyectan comprar cerca de setenta pisos en la isla.

Desde hace tiempo buscábamos la fórmula para tener un solo casero en lugar de tener cien. Por eso hablamos con asocimi, la patronal de las socimis, y en marzo de 2021 lanzamos el proyecto Primero H, que tiene como partners a asocimi y a Hogar Sí. Las socimis son sociedades que captan inversores para comprar inmuebles y alquilarlos. Primero H es la primera socimi social, y lo que hará será buscar inversores para poder comprar las viviendas. Primero H las alquilará a Hogar Sí en condiciones de alquiler asequible. A precio de mercado, pero en la banda baja, y a unas condiciones de asequibilidad facilitando hacer el contrato y el tema de los avales. Unas condiciones que es complicado negociar con cien caseros distintos.

Imagino que esos inversores querrán obtener un beneficio a cambio.

Van a tener un beneficio. Hay dos tipos de retorno. Primero, uno económico. La socimi tiene obligación por ley de repartir beneficios cada año a sus inversores, aunque será menor al que están acostumbrados. Pero les daremos un retorno económico. Y un retorno social, que es integrar a esas personas que ahora están en la calle.

¿Quiénes son esos inversores?

Ahora mismo sobre todo son institucionales. También hay otras socimis que invierten con nosotros.

Llama la atención que fondos de inversión se impliquen en un proyecto social.

Una socimi no es un fondo de inversión. La socimi invierte en inmuebles para alquilarlos. Y aunque pueda sonar raro, es la fórmula más lógica.

¿A quién comprarán los pisos?

A todo el que nos lo quiera vender a un precio razonable. Habíamos pensado pagar en torno a cien mil euros, pero con los precios de Mallorca seguramente tendremos que subir ese target. Provivienda le hace una visita para asegurarse de que reúne las condiciones necesarias para el proyecto. Podemos asumir una pequeña reforma, pero sobre todo nos queremos asegurar de que el piso esté en un barrio con una vida comunitaria, servicios y transporte. No compramos edificios, nos aseguramos de que sean viviendas dispersas para evitar guettos. Y que se dé esa integración comunitaria.

¿A quiénes irán destinados?

A personas afectadas por sinhogarismo que vienen derivadas por el IMAS. Pagarán un 30% de sus ingresos, si los tienen, por su participación en el programa. Pero si tienen cero ingresos, pues cero. Nos dirigimos al perfil más vulnerable, que son las personas que han estado en la calle.

¿Cuándo comprarán los primeros pisos?

Espero que en 2023 tengamos ya a algún inquilino. No creo que seamos capaces de tener todas las viviendas, pero esperamos adquirir las primeras este año.

Los profesionales de la isla debaten sobre dos modelos para abordar el ‘sinhogarismo’ 

El auditorio del ParcBit acoge entre ayer y hoy una serie de talleres y mesas redondas para debatir sobre dos métodos para abordar el ‘sinhogarismo’: el modelo de escalera y el de ‘housing’.  El primero implica una serie de procesos y casas de acogida para personas en situación de calle, desde que se establece un vínculo con ellos hasta que logran una vivienda en la que son completamente autónomos. El segundo implica proporcionarles ese inmueble como primer paso del proceso.

«En el método escalera el primer escalón es cubrir sus necesidades básicas con un techo, alimentación e higiene. Puede que tengan problemas de salud mental o consumos, pero no les pedimos en esa fase no les pedimos nada. Sí les podemos motivar para que inicien un proceso», explicó la trabajadora social Catalina Fullana.

«Una vez están motivados pasamos a un recurso de alquiler. Aquí ya hay más exigencia porque no pueden consumir alcohol o sustancias, tienen que estar abstinentes. Normalmente son pisos compartidos en los que tienen el acompañamiento de un trabajador social. Es el paso previo a la autonomía, son viviendas de tránsito e incluye talleres o laborterapia», valoró esta profesional.

En todo caso, Fullana señaló que «a veces no lo ponemos fácil», y puso como ejemplo el albergue de Ca l'Ardiaca. «Comparten habitación diez o más personas, incluyendo personas con consumos, víctimas de violencia de género o problemas de salud mental. No tenemos esa vivienda digna para empezar», lamentó.

Por su parte Ana María Olivares, coordinadora Housing First, explicó su modelo. «Le damos la vuelta a la escalera y decimos que la vivienda tiene que ser condición primera para establecer el proceso de recuperación», subrayó. «Hay un modelo de ‘housing first’ para perfiles cronificados que incluyen adicciones o problemas de salud mental. Y un modelo ‘housing led’ en el que se les plantea un circuito de recuperación a corto o medio plazo. Y partimos de la premisa de que todo tiene que ser voluntario», añadió.

El objetivo, destacó Olivares, es que «puedan recuperarse a sí mismos y disfrutar de vidas más plenas con una planificación centrada en la persona porque es el servicio el que se adapta a la persona y no al revés». Es importante que se la persona «la que toma las decisiones en todo el momento del proceso y nosotras lo acompañamos». 

Compartir el artículo

stats