Juliette es la décima borrasca de alto impacto que afecta España esta temporada y no será una que los mallorquines vayamos a olvidar fácilmente. A su paso ha dejado precipitaciones y nevadas de récord, torrentes desbordados, cortes eléctricos en más de doce municipios, más de once tramos de carretera cortados y por suerte ninguna víctima mortal. La borrasca Mediterránea ha dejado tras de sí un reguero de desperfectos, pero también ha sido de gran ayuda llenado acuíferos y embalses. Es la doble cara de la moneda de los temporales mediterráneos.

Lluvias de récord

Las lluvias asociadas a Juliette han sido de récord no tanto por su intensidad sino por su persistencia. En siete estaciones de Mallorca, se superaron los 200 litros por metro cuadrado en 48 horas que es la mitad de lo que llueve en todo un año en Palma. En Puigpunyent cayeron 280 litros cuando lo normal para un mes de febrero son 60 litros. En Pollença y Caimari cayeron 254 y 257 mm respectivamente. A mayor altitud, en las estaciones de montaña, los registros totales de precipitación no se sabrán con exactitud puesto que la nieve habrá rebosado de los pluviómetros.

En total se batieron unos 20 récords de precipitación acumulada en 24 horas según informó la Agencia Estatal de Meteorología en su cuenta de Twitter. Algunos de estos récords son bastante antiguos (años 70 y 80) lo que da cuenta de la excepcionalidad del episodio. En Sineu no llovía tanto en 24 horas desde 1934 y en el Port de Pollença desde 1944

Lluvias de récord AEMET y Balears Méteo

Una nevada excepcional

La nieve fue otra de las grandes protagonistas. El lunes llegó a cotas inusualmente bajas (entre 0 y 200 metros) cubriendo buena parte del interior, sur y levante de Mallorca. Llegó hasta el nivel del mar en Felanitx y Santanyí tiñendo de blanco la playa de Cala Llombards. Hay que remontarse al 2017 para ver una nevada al nivel del mar en Mallorca, aunque en este caso, no cuajó. El referente más cercano de nieve a cota cero es febrero de 2012 durante la famosa nevada en Palma y alrededores.

Vimos escenas que ya empezábamos a olvidar como Randa nevada o tramos de carretera cortados por nieve fuera de la Serra de Tramontana tales como Randa-Cura, Petra-Puig de Bonany, Felanitx-Sant Salvador y Manacor-Sant Llorenç.

En la Serra de Tramontana las acumulaciones de nieve por encima de 900 metros son directamente comparables con los Pirineos o incluso los Alpes. A unos 800 metros el espesor de nieve supera el metro. En la cima del Puig Major el espesor supera los dos metros y medio o incluso tres en algunos ventisqueros. En el techo de Baleares se registró una temperatura mínima de -6.4ºC que constituye la más baja registrada este invierno en Baleares.

Se trata pues de una de las nevadas más copiosas desde 1985 en las cumbres de Mallorca. El peso de la nieve sobre los árboles ha provocado la caída masiva de ramas que tardarán días o semanas en ser retiradas de carreteras y caminos. Es una poda natural beneficiosa pero la acumulación de masa forestal muerta puede actuar de combustible para futuros incendios forestales.

Viento y oleaje

Aunque el viento y oleaje no fueron en ningún caso de récord, sí fueron intensos y causaron muchos daños en municipios del norte de la isla como Alcúdia, Muro, Capdepera y Son Servera donde las rachas superaron los 90 Km/h en zonas urbanas.

La boya de Dragonera de Puertos del Estado midió olas de hasta 10.72 m el martes poco antes de la hora de comer. Durante la borrasca Gloria en enero de 2021, esta misma boya midió una altura máxima de oleaje de 14.2 metros. Por ello, el oleaje causado por Juliette no ha sido de récord, aunque ha impactado con energía sobre las costas.

Las rachas de viento asociadas a Juliette llegaron a los 153 Km/h en Formentor (Balears Méteo) y 122 Km/h en el faro de Capdepera. Es una “Tramontanada” de categoría, pero está lejos del récord oficial para Baleares: los 195.8 Km/h medidos en Alfàbia el 14 de abril de 1978 (AEMET). Tan solo hay que remontarse a 2021 para encontrar vientos mucho más intensos. El 22 de enero un anemómetro de Balears Méteo registró 198 Km/h en Sa Tudossa (Artà) en los albores de la borrasca Hortense.