El aeropuerto de Palma sufrió el miércoles, en las 238 operaciones programadas, ocho cancelaciones de vuelos, nueve desvíos y retrasos generalizados a consecuencia de la densa niebla que cubrió Palma desde la madrugada hasta el mediodía, nieblas de advección que se formaron en la bahía de Palma, se fueron desplazando hacia el interior de la isla y redujeron la visibilidad, unidas a la gran cantidad de polvo en suspensión en el ambiente que todavía se mantiene.
El aeropuerto de Palma se mostró vulnerable ante la situación de baja visibilidad puntual por la aplicación de los protocolos de seguridad, que espaciaron los vuelos, mantuvieron operaciones en espera sobrevolando sobre Mallorca, y provocaron que las demoras se fueran prolongando durante todo el día. Pero el motivo principal de las demoras fue la sustitución del sistema antiniebla de aterrizaje en el aeródromo de Palma, que empezó en febrero y finalizará la última semana de marzo. Y en concreto del que funciona en la pista Sur, de nivel II-III, el más avanzado con el que cuenta, que fue instalado en el año 2004 como un gran avance de seguridad y cuya vida útil ya estaba a punto de finalizar.
Fuentes de Aena han explicado a Diario de Mallorca que el aeropuerto de Palma está cambiando su denominado Sistema Instrumental de Aterrizaje, llamado ILS, que era una actuación ya prevista en sus planes de actualización y que se están aprovechando los meses de febrero y marzo, los de menos tráfico del año en Mallorca, para realizar el cambio por un modelo más nuevo, también del mismo nivel de seguridad, el nivel II-III, pues el instalado en la pista Norte es solo de nivel I. La previsión es que el nuevo sistema esté completamente operativo y vuelva a funcionar en la última semana de marzo, informaron las mismas fuentes.
El Sistema Instrumental de Aterrizajes
El Instrument Landing System, como se llama en su denominación inglesa, es el mecanismo de ayuda más conocido con el que cuentan los aeropuertos para los aterrizajes de aviones, principalmente en situaciones de baja visibilidad, un sistema de alta precisión que se compone de un equipo en tierra que emite las señales radioléctricas y del equipo a bordo del avión que las procesa y las muestra al piloto en el instrumental para que pueda navegar sin problemas.
De hecho, cuando se instaló este sistema más avanzado por primera vez en el aeropuerto Palma en el año 2004, las compañía Air Nostrum , que realizaba vuelos interislas y operaciones entre Baleares y la península con aviones Fokker 50 y ATR no tenía la instrumentación a bordo para beneficiarse de sus ventajas en situaciones de niebla densa.
El ILS guía al piloto horizontalmente y verticalmente hacia la pista del aeropuerto hasta que pueda conseguir suficientes referencias visuales para poder continuar la aproximación mirando fuera de la cabina.. Proporciona dos señales radioeléctricas. Una funciona como una guía lateral mientras que la otra señal proporciona una guía vertical. El equipo en tierra consiste en un grupo de antenas que dan la señal del localizador (guía lateral), y que normalmente están situadas a unos 300 metros al final de la pista .Y una antena trasmisora de la senda de planeo que está situada a un lado de la pista a la altura de la zona de contacto.
El Sistema Instrumental de Aterrizaje tiene diferentes categorías dependiendo de los requisitos de visibilidad. Cuanto menor es la visibilidad mayor precisión se necesita y se le nombra con una mayor categoría. Las categorías se dividen I, II Y III. Aunque la categoría III , cuenta asimismo con tres subdivisiones, permitiendo la última aterrizajes con nula visibilidad, como puede ocurrir en los aeropuertos de Londres.
