Los 18 miradores más espectaculares de Mallorca

Redacción

La pintoresca estampa de un atardecer desde lo alto de una colina, con el mar como telón de fondo, es una de las imágenes más ‘instagrameadas’ de Mallorca. En este artículo recopilamos los dieciocho miradores más espectaculares de la isla:

1. Cala Tuent (Escorca)

La sinuosa carretera de sa Calobra es una de las imágenes más pintorescas de la Serra de Tramuntana junto a Cala Tuent, una de las pocas calas vírgenes que se conservan en la isla y que se encuentra a los pies del Puig Major. Además del litoral, merece la pena visitar el mirador, que se sitúa a un kilómetro y medio aproximadamente de la playa, en dirección a Església de Sant Llorenç.

2. Embalse de Cúber (Escorca)

Cúber es un embalse artificial que se ubica a las faldas del Puig Major y desde donde arrancan un sinfín de excursiones por el paraje natural de la Serra de Tramuntana. Aunque una de las mejores panorámicas de este estanque se consiguen desde el mirador que se encuentra por la serpenteante carretera Ma-10 procedente de Sóller. Tras cruzar el túnel, se recomienda estacionar en cuanto se pueda para disfrutar de las vistas.

3. El Toro (Calvià)

El mirador de El Toro (Calvià) es otro de los imprescindibles de esta lista para disfrutar de unas imponentes vistas con el mar como telón de fondo. Desde este punto se observa la Illa del Toro, una lengua de roca que corre bruscamente hacia el mar que se encuentra rodeada de otros pequeños islotes. Tras esta panorámica, a pocos metros se sitúa la zona miliar. Pueden estacionar en la Avinguda del Mar.

4. Illes Malgrats (Santa Ponça)

La costa ‘calvianera’ cuenta con otra de las imágenes más ‘instagrameadas’ del momento: las Illes Malgrats. Para observar la belleza de este conjunto de pequeños islotes, lo más fácil es hacerlo desde el mirador las Malgrats, ubicado en Gran Vía dels Malgrats; aunque también se puede ver desde otros puntos de Santa Ponça. Cabe destacar que este espacio está catalogado como reserva marina por su alto valor pesquero y ecológico. 

5. Ermita de Portals Nous (Calvià)

La estampa que se consigue desde la Ermita de Portals Nous (Calvià) no deja indiferente a nadie. Desde lo alto de la colina se observa el elegante puerto de Portals Nous así como la Platja de s’Oratori. Para estacionar su vehículo, lo pueden hacer en la calle Oratori o en la plaça Oratori. En caso de querer visitar la ermita, se recomienda que consulten el horario, ya que varía según a estación del año.

6. Puig de la Moneda (Valldemossa)

Valldemossa es de las localidades más pintorescas de Mallorca, y por sus calles empedradas han transitado artistas y escritores de renombre como Chopin, Unamuno o Rubén Darío. Desde el Puig de La Moneda también se obtienen unas espectaculares vistas de la isla, donde se junta el paraje de la Serra con el mar. El mirador se encuentra en la urbanización George Sand, a cinco kilómetros del pueblo. Se recomienda estacionar en la calle del Mig.

7. Urbanización de sa Torre (Llucmajor)

A lo largo de la costa de la urbanización de sa Torre (Llucmajor) hay un mirador tras otro, a cada cual mejor. Entre los más populares está el del final de la calle d’Andorra. Desde ahí, se puede disfrutar de los acantilados y los fines de semana maravíllense con los numerosos deportistas practicando parapente.

8. Son Vida (Palma)

Pasear por la zona residencial de Son Vida (una de las más exclusivas de Palma) merece la pena solo por ver la espectacular panorámica de la ciudad. El punto más alto se alcanza en la calle Albercuix, desde donde se puede vislumbrar la Bahía de Palma así como toda la extensión de la ciudad. Cabe advertir que las carreteras de acceso a esta zona residencial tienen mucha pendiente.

9. Na Burguesa (Palma)

Otro de los imprescindibles si visita Palma es subir hasta el mirador de na Burguesa, a 440 m, en el barrio de Génova. Desde lo alto de la colina se puede ver toda la ciudad y sus peculiaridades: desde el Puerto de Palma, pasando por la catedral y el Castell de Bellver, hasta un sinfín de sierras y construcciones. Arriba también encontrarán una estatua con el mismo nombre.

10. Castell de Bellver (Palma)

Un clásico que siempre vale la pena: un viaje hasta el Castell de Bellver para contemplar Palma. Se trata de una fortificación de estilo gótico construida a principios del siglo XIV por orden del rey Jaume II que además de ofrecer una interesante visita cultural nos muestra una bonita panorámica de la ciudad. Se puede subir caminando (a través de la calle Bellver o por sus muchos caminos de grava) o en coche (arriba hay aparcamiento). Consulten el horario de apertura ya que varía con la estación del año.

11. Far de Cap Gros (Port de Sóller)

La mejor vista del Port de Sóller sin duda se obtiene desde el Far de Cap Gros. Para disfrutar de este paraje natural, hay que caminar un kilómetro y medio por una empinada carretera que parte del Port. Una vez en el faro encontraremos una pequeña explanada que sirve de estacionamiento y junto a ella, se sitúa el Refugi de Muleta. Aunque las vistas siempre son espectaculares, este lugar destaca por sus atardeceres. 

12. Far de Cap de Formentor (Pollença)

Entre las postales ‘típicas’ de Mallorca no puede faltar la fotografía de la sinuosa carretera hacia el Cap de Formentor. Unas imágenes que corren hoy en día como la pólvora por la redes sociales, lo que ha provocado el colapso de su acceso en los meses estivales. Por ello, en verano se restringe su paso y solo se puede acceder con el bus lanzadera o pagando una consumición en el local de arriba. Eso sí, las vistas son de ensueño (todo el año).

13. Es Colomer (Pollença)

Para quien el serpenteante camino hacia el Far de Formentor es demasiado vertiginoso, puede pararse en el mirador de es Colomer, desde donde obtendrá unas impresionantes vistas sin sufrir la carretera. Desde este punto se observa el Cap de Formentor (el punto más al norte de la isla), así como el mar abierto junto a los acantilados. Al tener tan fácil acceso, estacionar en este espacio puede ser complicado en muchas ocasiones.

14. Coll dels Reis (sa Calobra, Escorca)

La localidad de Escorca esconde más rincones paradisíacos como el mirador Coll dels Reis. Una parada obligatoria para muchos viajeros desde donde se puede fotografiar el encanto de la Serra de Tramuntana, tanto por su belleza natural como por el ‘postureo’ de obtener la típica foto de la sinuosa carretera de sa Calobra. A este mirador se accede justo después de la “curva de amarre” Nus de sa Corbata, en la Ma-2141. Estacionar ahí en los meses estivales es todo un reto.

15. Santuari de Cura (Randa)

Las vistas desde 550 metros de altura suelen prometer, y desde el Puig de Randa no defraudan. Ya el camino (si se hace a pie) es llevadero. Y una vez ahí arriba la panorámica de Pla de Mallorca es de postal, además de impresionar el propio Santuari de Cura (un histórico monasterio del siglo XIV que es reclamo para muchos). Los merenderos y los miradores hacen la estancia muy agradable cualquier época del año.

16. Sa Foradada (Deià)

El ‘selfie’ con sa Foradada de fondo se ha vuelto una de las imágenes más virales en las redes sociales durante el verano. Una instantánea, para muchos obligada tras su estancia en la isla, que se puede hacer desde varios puntos. El más recomendable es desde el mirador de Son Marroig (espacio que congrega a centenares de personas cada año). Otro punto estratégico es desde el Puig de La Moneda.

17. Mirador de ses Barques (Sóller)

Otro de los miradores estrella de Mallorca es el de ses Barques, ubicado en Sóller. Un espacio que invita a relajarse aunque suele estar demasiado concurrido. Situado a 400 metros de altura, se encuentra la carretera Ma-10, entre el pueblo de Sóller y el embalse de Cúber. Un punto estratégico, no solo por sus vistas, sino por la cantidad de excursiones que salen desde ahí, como por ejemplo la ruta de La Costera.

18. Torre del Verger (Banyalbufar)

También conocida como Torre de ses Ànimes, es uno de los miradores más populares de Mallorca. Situado en la carretera Ma-10, ha sido reformado recientemente y es de fácil acceso.