La innovación y la digitalización marcarán el futuro del sector agrario en Balears ya que de estos dos factores también va a depender el relevo generacional. Ésta fue una de las conclusiones a las que llegaron los participantes en el Foro Agrario celebrado el pasado jueves en el Club Diario de Mallorca con el patrocinio de AgroBank de CaixaBank. Diferentes expertos fueron convocados para participar en este evento para analizar y poner sobre la mesa las principales necesidades del sector así como las oportunidades para afianzarse como una actividad económica de futuro. 

El debate, conducido por Felip Munar, colaborador de este diario, contó con la participación de Joan Simonet, gerente de ASAJA, Fernando Fernández, director general de Agricultura y Ganadería;Marta Terrassa, responsable del obrador de APAEMA; Guillem Bibiloni, director de AgroBank en Baleares; Toni Monjo, director de Som Pagesos, y María Francisca Parets, directora gerente de Cooperatives Agro-alimentàries de Balears.  

Dolors Feliu, directora comercial de Banca Retail de CaixaBank en Balears, fue la encargada de abrir el evento. Feliu subrayó que hace 9 años que CaixaBank creó la marca AgroBank para reforzar los servicios al sector primario. Para ello, la entidad ha formado a su equipo profesional y creado productos y servicios específicos, convirtiéndose en la entidad financiara referente del sector con 10.000 clientes, 48 profesionales y 16 oficinas en las islas.Así mismo Feliu celebró que en 2022 AgroBank ha concedido en Balears 228 millones de euros en financiación «lo que demuestra que el sector está a la altura».

Joan Simonet, Guillem Bibiloni, Marta Terrassa, Dolors Feliu, Felip Munar, Mae de la Concha, María Francisca Parets, Joan Monjo y Fernando Fernández posan antes del comienzo del Foro Agrario celebrado en el Club Diario de Mallorca el pasado jueves. Pere Joan Oliver

Vivir de la agricultura

Si es posible vivir de la agricultura, ¿qué cambiós estructurales serían necesarios para poder dedicarse al campo? Ésta fue la primera cuestión lanzada por Felip Munar para abrir el debate e introducir las diferentes problemáticas que presenta el sector para ser una actividad económica rentable y, por tanto, de futuro. Munar también mencionó algunas cuestiones candentes como el papel de la mujer, los parámetros de calidad o las relaciones del campo con el sector turístico. Fernando Fernández resaltó que contar con una conselleria de Agricultura es una «decisión política» importante para trazar una estrategia y crear un espacio de trabajo a largo plazo, con visión de futuro. Fernández destacó como claves la recuperación de las relaciones entre la Conselleria y el sector, reconociendo las exigencias específicas, así como la recuperación de la voz de Balears en el conjunto del Estado. Fernández celebró que el nuevo PACreconozca la insularidad y estimó que «el sector está más robusto que en 2019, ha aprendido a venderse y a comercializar su producto. La digitalización será un cambio cultural importante, pero es una oportunidad para que la gente joven se incorpore al campo», resumió. 

La fortaleza del sector se traduce en iniciativas como Som Pagesos que tal y como explicó Joan Monjo está formada por los cuatro principales productores hortofrutícolas de Mallorca que representan el 80% de la producción. Además de crear una marca de calidad que identifica y certifica el producto local, Som Pagesos ha firmado convenios con el sector Horeca y la Federación Hotelera de Mallorca. Monjo apuntó algunas de las cuestiones que debens resolverse que ponen en peligro su continuidad: La escasez de mano de obra, el relevo generacional, el cambio climático, la falta de suministros y el incremento de los precios. «Hay que dar voz al sector, reforzar la soberanía alimentaria. El producto de Mallorca no puede desaparecer», enfatizó Monjo. Desde Som Pagesos destacó la fuerza de la unión y pidió «el compromiso y la participación de todos los actores: entidades financieras, grandes superficies, minoristas y consumidores». 

Para Joan Simonet es importante que la agricultura se perciba como un modelo empresarial y económico y que el agricultor se desmarque del paternalismo: «Las ayudas tienen que ser un complemento», insistió. Además de coincidir en el análisis de Monjo sobre las problemáticas del sector, Simonet señaló los retos financieros y la convivencia del sector con el turismo. Para el gerente de ASAJA es importante que el agricultor sea consciente de lo que el consumidor demanda, que tenga claro su modelo de negocio y que tome sus decisiones empresariales, todo ello con el apoyo de las administraciones. 

La fuerza del colectivo

María Francisca Parets destacó que los retos a los que se va enfrentar el sector «no van a poder abordarse sin cooperación». Precisamente, desde Cooperatives Agro-alimentàries se han diseñado planes estratégicos para abordar las exigencias medioambientales o de digitalización. Parets enfatizó la importancia de llegar a la sostenibilidad económica, de dar a los agricultores las herramientas necesarias para conseguir la rentabilidad y de la importancia de las actuaciones colectivas. Así mismo destacó que el consumidor, con sus decisiones, también forma parte del sistema alimentario. 

Marta Terrassa también apostó por la colectividad y reconoció la importancia de la divulgación sobre le producto local y el producto ecológico. Terrassa explicó la experiencia de APAEMA con la creación de un obrador para la transformación de los excedentes hortofrutícolas de sus socios en el que se elaboran 60 referencias. «Estamos elaborando producto local transformado de calidad y ecológica». Terrassa puso el acento en que el relevo generacional también será ecológico puesto que «los jóvenes apuestan por el producto ecológico y tenemos que apoyarles». En cuanto a la formación de los jóvenes que quieren incorporarse al campo, se asumió como crucial modernizar la FP, introduciendo cambios que abarquen la digitalización, herramienta que en última instancia va a facilitar el trabajo en el campo. Fernández insistió en que se debe realizar un cambio en la FPe introducir novedades como el módulo de agricultura ecológica

Guillem Bibiloni apuntó que la organización de jornadas como el Foro Agrario forma parte de las iniciativas de apoyo al sector llevadas a cabo por AgroBank. Bibiloni también identificó como prioritario que el sector primario avance en digitalización e innovación para ser más productivo y resaltó la apuesta de la entidad con acciones específicas encaminadas a garantizar el relevo generacional. Bibiloni destacó así mismo que Agrobank se ha convertido en la marca de referencia del sector al haber creado productos y servicios diferenciales partiendo de un análisis profundo del sector. A todo ello que hay que sumar su amplia red de oficinas y el personal con formación específica. 

Un producto competitivo

Si bien no se puede proteger el producto local limitando la entrada de productos de otros lugares, Fernando Fernández recordó que nuestro mercado interior es la Unión Europea y que esto debe verse como una oportunidad para poder exportar los productos de Balears. Fernández apuntó que todos los productos que se comercialicen en la Unión Europea deberían cumplir con los mismos estándares para que haya «reciprocidad en las relaciones comerciales y avanzar en las denominadas cláusulas espejo». En este sentido Joan Simonet apuntó que deben reforzarse las tareas de control administrativas a la hora de identificar los productos propios. Toni Monjo argumentó que se ha de avanzar en eficiencia y rentabilidad, apostando por la calidad y por reforzar el producto local. 

Por último se puso sobre la mesa la importancia de apoyar la investigación en el terreno agroalimentario. En este sentido Fernández recordó que si bien la administración ha de apoyar proyectos de investigación, estos han de estar vinculados al sector privado y respaldados por la Universidad. A este respecto Simonet recalcó que a menudo los proyectos de investigación no están conectados con las exigencias reales del sector y criticó el exceso de burocracia exigido para solicitar líneas de ayuda de investigación destinadas a empresas y Universidad.

La consellera de Agricultura Mae de la Concha fue la encargada de clausurar el acto recordando en primer lugar la importancia de la alimentación y del cuidado de la tierra . La titular de Agricultura coincidió en que se tiene que trabajar desde un proyecto común, de crear espacios de debate y reflexión y de apoyar al sector: «Es fundamental que no caiga», enfatizó. La consellera también mencionó los retos a los que se enfrenta el sector tales como la transición ecológica y la transición digital

Tras las palabras de Mae de la Concha los asistentes al acto disfrutaron de un cóctel ofrecido en las instalaciones del Club Diario de Mallorca