El PSIB se queda solo en la defensa de la exoneración del catalán en la sanidad balear. Més per Mallorca, Podemos, Més per Menorca y El Pi han criticado esta mañana el posicionamiento del partido de Francina Armengol y recuerdan que se trata de "defender" los derechos de los ciudadanos a ser atendidos en cualquiera de las dos lenguas oficiales. Tal como ha anunciado esta mañana este diario, Més junto a la Obra Cultura Balear (OCB) está preparando una medida de presión que asusta a los socialistas. Se trata de la convocatoria del Consell Social per la Llengua, un órgano asesor del Govern integrado por lingüistas de relevancia a nivel balear y que han comunicado por carta a la presidenta, Francina Armengol, que dimitirían en masa si se seguía adelante en la exoneración del catalán en la sanidad pública.

Preside el Consell Social per la Llengua la propia Armengol, pero como hace más de un año que no se han reunido cualquiera de los tres vicepresidentes puede convocarlo y emitir un informe contrario a los posicionamientos del Govern. El secretario autonómico de Universidad, Miquel Àngel Sureda (Més); la directora general de Política Linguïstica, Beatriu Defior, y el presidente de la Obra Cultura Balear, Joan Miralles, son los vicepresidentes que pueden convocar el órgano consultivo. Los socialistas han advertido a Més que si se convoca el Consell Social de la Llengua pasando por encima de Armengol se considerará una "deslealtad" y una "fractura del Pacto".

Més per Menorca recuerda al PSIB que "hay que cumplir el Estatuto de Autonomía", donde se establece que tienen derecho a dirigirse en cualquiera de las dos lenguas. Así, pide al Govern que "recapacite" y cumpla con la ley y los derechos de los ciudadanos. Además apunta que en caso de poder revalidar el Pacto en mayo de este año la socialista necesitará los votos del partido menorquín y exigirán que rectifique si quiere contar con su apoyo.

PSIB y Més se acusan mutuamente de "deslealtad" por las diferencias acerca de quién debe convocar el pleno. Los socialistas consideran que debe ser la presidenta del Govern, mientras Més per Mallorca acusa a los socialistas de "deslealtad" porque es la socialista quien se niega a convocarlo.

Desde El Pi considera "muy grave" y una ·"deslealtad" que el Govern no cumpla con la normativa referente al personal de Salud: "Estamos hablando de un proceso de estabilización, eso quiere decir que ese personal ya ocupa plazas de forma interina y pasara a hacerlo de forma definitiva, así que no tiene ningún sentido hablar de déficit de plazas".