El vicepresidente del Govern, Juan Pedro Yllanes, aprovechó ayer su participación en un acto del Ministerio de Asuntos Sociales, liderado por la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, para reclamar a Francina Armengol que utilice su visita a Fitur para presionar al sector turístico para que se adhiera «urgentemente» a la transición energética y climática. Aunque confesó que no albergaba muchas esperanzas después de ver la agenda de la presidenta del Govern y, sobre todo, tras leer la entrevista concedida por la socialista a Diario de Mallorca en la que afirmaba que «el turismo es democracia».

Asimismo afirma que «cuando escucho hablar de turismo sostenible se me eriza la piel, es un oxímoron» y manifiesta que «echamos de menos una implicación mayor del sector turístico porque la mayor fuente de emisión de gases de efecto invernadero están directamente vinculados con el turismo».

En este sentido, expresa que antes la producción de energía era la principal fuente de emisiones pero «afortunadamente» han conseguido reducirla: «Queremos que el sector turístico se implique en la descarbonización porque es totalmente necesario, tienen que dar pasos en materia de eficiencia y ahorro energético».

Finalmente reitera que en estos momentos el sector de instaladores eléctricos reclama 1000 trabajadores para seguir desarrollando las energías renovables.