Caixabank ha cerrado su sucursal de la confluencia entre las calles Sant Miquel y Avenidas de Palma, han confirmado a este diario fuentes de la entidad, la que fuera la principal oficina de la antigua Sa Nostra en la zona, en el edificio diseñado por el arquitecto Josep Ferragut Canals a finales de la década de los ochenta que ocupa el chaflán entre las dos vías. Se trata, no obstante, de un cierre temporal, aunque sin fecha de apertura, hasta que el banco, en pleno proceso de reordenación de sus oficinas, decida a qué función destina el local de su propiedad

Poco ha durado el rótulo de la Caixabank en la fachada principal del inmueble, tras el inicio de la fusión con Bankia en noviembre de 2021. Los clientes de la sucursal serán trasladados a la oficina de Alexandre Rosselló número 15, aunque temporalmente serán atendidos en la del número 20 de la calle Aragón, pues esta sucursal, inaugurada en septiembre de 2015 como Concept Store, se encuentra en obras, dentro de los planes de la entidad de especialización y reordenación de sus espacios abiertos al público. Y una vez finalizados los trabajos va a dedicar su planta baja a clientes particulares y su primera planta a clientes de banca premiere, confirmaron fuentes de la entidad, con lo que muchos sus clientes también han sido trasladados temporalmente a la citada oficina de la calle Aragón.

La oficina bancaria de Caixabank ha cerrado sus puertas y trasladado a sus clientes Raúl Sanz

Palma ha perdido la mitad de sus oficinas bancarias en los últimos siete años, una tendencia que ha afectado a todo el país (en España la media de sucursales cerradas está en torno al 58,5%) desde que estallara la crisis financiera en 2008. Estos cierres se deben a un efecto combinado de factores coyunturales: el ajuste de los excesos de la burbuja inmobiliaria y financiera, los tipos oficiales negativos que deprimían los ingresos y un cambio estructural con la creciente digitalización de la economía y la sociedad

Los datos del Banco de España señalan que en marzo de 2015 había registradas en Palma un total de 336 oficinas de entidades de crédito; en el mismo mes de 2022, justo siete años después, la cifra se reduce a 164 oficinas registradas, lo que supone el cierre del 50%. Así las cosas, de media, en Palma, habría una sucursal cada 2.554 habitantes.

Imagen del edificio cuando era de Sa Nostra Diario de Mallorca