El Consell de Mallorca aprobó ayer los presupuestos de 2023. Unas cuentas que ascienden a 620,8 millones, de los que el Consell destinará 6 de cada 10 euros a políticas sociales y 46 millones a los ayuntamientos, de los que 20 serán para reparar fugas de agua. Asimismo, el Pacto de Izquierdas habilitará un escudo social de ayudas directas para combatir el alza de precios y la inflación que asciende a 17 millones de euros. La izquierda en pleno avaló las cuentas. Recibieron el voto negativo de PP, C’s y Vox, así como la abstención de El Pi.

Josep Lluís Colom, conseller insular de Hacienda explicó que se trata de unas cuentas que suponen una «palanca para hacer frente a las necesidades de la ciudadanía ante la situación de inflación que están sufriendo». Colom detalló que el presupuesto crece en un 16,6% con respecto al de este año, superando por primera vez en la historia los 600 millones de euros. El portavoz popular, Llorenç Galmés, acusó de confeccionar unos presupuestos con «afán electoralista para comprar el voto de los mallorquines» y con «inversiones que hace ocho años que anuncian pero no ejecutan por la falta de gestión y de planificación».

En materia de inversiones mención especial de los 140 millones en proyectos de carreteras e infraestructuras, así como los 49 millones que la institución insular enviará a los ayuntamientos para que impulsen obra pública para la mejora de infraestructuras. En esta legislatura el Consell superará los 150 millones entregados a los municipios mallorquines. Destaca los 20 millones que se utilizarán para la reparación de las redes municipales de abastecimiento de agua y hacer frente a las fugas de agua, una de los problemas más graves que sufren los pueblos y ciudades de Mallorca. En este caso, 14 millones proceden de la ecotasa y el Consell la suplementará hasta llegar a los 20 millones.

El Institut Mallorquí d’Afers Socials (IMAS) gestionará el 45% del presupuesto de todo el Consell. Un total de 274,8 millones tendrá el organismo de asuntos sociales, lo que supone un incremento del 14,7%.

Asimismo, el Consell anunció que ha enjugado la deuda y en estos momentos la «institución está del todo saneada», aseguró el conseller Colom. Algo que también pusieron de relieve tanto desde Podemos como de Més. El Consell ha pasado de tener unos 130 millones de euros de deuda hace 10 años a dejarla a cero en 2023. La consellera de Ciudadanos, Margalida Roig, aseguró que la formación naranja «no puede apoyar unos presupuestos que venden como un éxito incluir iniciativas que no se han ejecutado durante años».

El Pi ha decidido abstenerse en la aprobación de estos presupuestos al alcanzar un acuerdo con el Pacto para que se incluyan tres millones de euros en los presupuestos y destinarlos a reparar las infraestructuras de carreteras que provocaron las inundaciones de Sant Llorenç en 2018, entre otras contrapartidas. Xisca Mora, portavoz de El Pi, afirmó que no votan a favor debido a que desde Més no les han aceptado algunas enmiendas que ellos consideraban importantes.

Pleno bronco Enfrentamiento constante entre el PSIB y el PP

El Pleno de los presupuestos fue muy bronco entre el PP y el PSIB. Los socialistas iniciaron el pleno indicando que los populares presentaron todas sus enmiendas fuera de plazo y la presidenta Cladera reveló que la enmienda a la totalidad llegó 14 minutos tarde. El PP indicó que fue un problema del registro telemático. Al final se aceptaron las enmiendas. Después, del PP abandonó el pleno unos minutos acusando al PSOE de alterar las intervenciones.