Las reservas para las comidas de empresa y familiares durante la Navidad apenas han comenzado a activarse en Mallorca, a diferencia de lo que está sucediendo en otros puntos del país, según señala el presidente de la patronal Restauración-CAEB, Alfonso Robledo. Pese a que los niveles actuales son claramente inferiores a los de 2019, este representante empresarial dista mucho de ser pesimista, y pronostica una potente reactivación durante los próximos días, con una facturación que terminará siendo superior a la que se registraba antes de la pandemia.
La teoría de Robledo es que el retraso en las citadas reservas está vinculado con la meteorología, ya que «nadie piensa en la Navidad con las altas temperaturas que hemos registrado», pero apuesta por un potente incremento porque «tras un buen verano turístico siempre viene un buen invierno», por la ausencia de restricciones durante el próximo diciembre y «porque la gente tiene ganas de volver a celebrar este tipo de encuentros tras la pandemia». Prueba de ello, añade, es que durante los últimos días ya comienza a detectarse un creciente número de reservas para comidas de empresa. Por todo ello, vaticina que esta próxima Navidad, al igual que durante el conjunto del presente año, la facturación va a ser superior a la de 2019.
El problema de los costes
Alfonso Robledo reconoce que la recuperación que se ha dado en su actividad es superior a la de otros sectores, como podría ser el caso del comercio, pero advierte de que ello no supone que los últimos meses hayan estado exentos de problemas. El principal, añade, ha sido el intenso aumento de los gastos, lo que está provocando que, frente a una facturación récord, los beneficios hayan estado por debajo de los niveles prepandemia.
La prueba de ello, apunta el presidente de Restauración-CAEB, son los cambios que estos establecimientos se han visto obligados a hacer en su oferta. Sobre este punto, indica uno que se ha hecho muy evidente, y es la sustitución en muchos establecimientos del tradicional menú por el ‘plato del día’, con el fin de rebajar costes y no tener que elevar los precios de forma visible.
Además, Alfonso Robledo recuerda que los bares y restaurantes de los municipios de interior y de los polígonos industriales no se han visto beneficiados por la fuerte entrada de turismo, y que su ‘temporada alta’ se registra durante el invierno, por lo que presentan en estos momentos una situación de mayor debilidad.
