El documento Estratègia Mallorca 2030-Medi Ambient, elaborado por entidades y especialistas en la materia, está en manos del Consell desde el pasado febrero. En él se contienen claves para hacer frente al cambio climático, la sobreexplotación de recursos o la sobrepoblación. De momento, la institución insular no ha movido ficha con el informe. Este diario ha tenido acceso a su contenido, cuyo coordinador es el biólogo Xavier Pastor. Entre las propuestas, se menciona la necesidad de reforzar la política fiscal y de reorientar la finalidad de la ecotasa.

IMPUESTOS VERDES

Aprobación de una ley de fiscalidad ambiental redistributiva

«Establecer una ley de fiscalidad ambiental que haga prevalecer la restauración y conservación del medio ambiente penalizando la contaminación y el mal aprovechamiento de los recursos. La fiscalidad tendría carácter redistributivo y finalista», recoge uno de los puntos de la Estratègia Mallorca 2030. En este mismo apartado también se recoge el mecanismo de las desgravaciones fiscales para fomentar actividades de reparación y reutilización, «especialmente de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, ropa y muebles». «Aplicar medidas y fiscalidad ambiental finalista a los productos de corta duración, de obsolescencia programada y a los envases de un solo uso». En el caso del agua, la tasación progresiva en función del consumo para desincentivar los abusos. Asimismo también se recomiendan medidas fiscales para favorecer la venta a nivel local de productos ecológicos. Y adaptar los impuestos a los impactos generados. «Hay que premiar con incentivos fiscales la neutralidad de la actividad económica».

ECOTASA

Impulso a proyectos de diversificación y transición ecológica

El documento que tiene el Consell desde el pasado febrero en un cajón también recoge una serie de consideraciones sobre la ecotasa. Los expertos que han participado en el documento reclaman que el fondo del impuesto se destine íntegramente a financiar proyectos que estén en la línea de la diversificación y transición socioecológica y en este sentido se financien exclusivamente proyectos que vayan en las líneas siguientes: propuestas de protección, preservación, recuperación y adaptación del medio natural, rural, agrario y marino como objetivos estratégicos de diversificación económica enfocada a una economía de autoabastecimiento, para reducir la vulnerabilidad de la isla y asumir los límites materiales y de recursos del territorio y generar un modelo menos intensivo en consumo de recursos que no se tienen y menos generador de desequilibrios ambientales como la crisis climática y sociales. La ecotasa, según estas entidades, también podría dar impulso a proyectos de investigación científica, desarrollo e innovación tecnológica que contribuyan a la diversificación económica, la lucha contra el cambio climático, la adaptación a los cambios que inducirá el cambio climático, como son la fertilidad, la disponibilidad de recursos hídricos o el acceso a los recursos energéticos. Los fondos del ITS también podrían usarse para fomentar la ocupación en la estrategia planteada en las anteriores propuestas de diversificación económica y transición socioecológica.