El claustro del IES Felanitx se suma a la lista de institutos que se posicionan contra la aplicación de la LOMLOE. Se añaden así a la lista de centros cuyos profesores han mostrado su rechazo a los modos de implantación de la reforma educativa: Medina Mayurqa, IES Sineu, IES Joan Alcover, Guillem Cifre, IES Santa Margalida, Joan Maria Thomàs, IES Capdepera, IES Puig de Sa Font y el IES Mossèn Alcover.

El profesorado de este centro ha enviado una carta a la conselleria de Educación explicando que han votado en contra de la propuesta pedagógica de implantación de la nueva ley presentada por distintos departamentos ("a pesar de no dudar de su profesionalidad", precisan) al no poder acepar "de ninguna forma" como se ha implantado la ley "ni los efectos colaterales que se derivan". Por eso, quieren dejar constancia del "malestar profundo" que significa para los docentes "poner en marcha una ley de esta envergadura de forma tan apresurada".

Improvisación

Los docentes subrayan que el hecho que la ley se haya publicado "tarde" y que, además, los documentos que dependen –como las resoluciones de evaluación– hayan sufrido modificaciones una vez iniciado el curso "son una muestra evidente de la improvisación con que se trabaja y, consiguientemente, con que nos hacen trabajar en todo el colectivo docente". Ante esto, prosiguen en su carta, solo podemos pensar que esta improvisación solo propicia "la inseguridad de los profesionales", que no han podido formarse "adecuadamente" denuncian, y conduce, advierten, a un trabajo "sin ninguna garantía de éxito".

Además, señalan que tanto desde el Gobierno central como desde el autonómico "parece que piensen" que la mejora del proceso educativo recae "únicamente" en la dinámica con que se trabaja en el aula, y que no intervienen otros factores (como la dotación económica de los centros, las ratios o la responsabilidad de las familias...). El claustro del IES Felanitx considera que éste es un punto de partida "muy pobre" para abordar una transformación verdadera de la enseñanza. En definitiva, concluyen, reiteran su "inquietud" ante una política educativa que creen que no aborda en profundidad el problema de la enseñanza actual y que implica "hacer recaer la responsabilidad únicamente en los docentes sin haber establecido las bases adecuadas".