El portavoz del Partido Popular en el Parlament, Toni Costa, denunció ayer la existencia de más casos de familiares del director general del IB-Salut, Manuel Palomino, a los que presuntamente habría colocado en el Servei de Salut de les Illes Balears.

Además de su esposa, hijo, hija y nuera, el PP ha tenido ahora conocimiento de que la sobrina de Palomino y la pareja de ésta también ocupan puestos en el departamento de Gestión Sanitaria y Asistencial de las Illes Balears (GSAIB), denunció Costa tras la reunión de la Junta de Portavoces. Reunión en la que los partidos que apoyan el Govern de Francina Armengol rechazaron la petición del Partido Popular para que la consellera de Salud, Patricia Gómez, comparezca en el Parlament para dar pormenorizadas explicaciones sobre todos estos «reiterados casos de enchufismo y nepotismo», lamentó el portavoz.

«Primero supimos que la mujer de Palomino se había beneficiado de una oportuna promoción interna en el IB-Salut, que su hija y su nuera se habían visto también beneficiadas de un oportuno traslado de Son Espases al hospital psiquiátrico, donde sus condiciones laborales son mejores, y que su hijo, sin ningún proceso de selección ni formar parte de ningún bolsín, ha sido contratado en el GSAIB, entidad de la que Palomino es único gestor. Y tras todo esto sabemos ahora que, además de su mujer, su hija, su hijo y su nuera, su sobrina y la pareja de esta también han sido contratados en el GSAIB», señaló Costa.

Según Costa «el enchufismo y nepotismo en la Conselleria Familiar de Salud comenzó desde que Francina Armengol nombró a Patricia Gómez consellera».

«Lo primero que hizo Gómez fue nombrar a su entonces pareja y ahora marido, Juli Fuster, director del IB-Salut. Un claro caso de nepotismo por el que existe un mandamiento del Parlament del mismo mes de septiembre de 2015 que exigía el cese inmediato de Fuster por un caso clarísimo de nepotismo. Ni Gómez ni Armengol destituyeron a Juli Fuster. El nepotismo ya empezó en 2015, ha durado durante toda la legislatura pasada y ha continuado en la actual».

Un nepotismo con el que continuó el propio Fuster el pasado verano «por no abstenerse en un caso evidente de abstención en unas oposiciones en las que participaban su hija y su yerno», recordó el PP.