En los primeros seis meses del año, los inspectores del Consell de Mallorca cazaron a 155 establecimientos turísticos ilegales en la isla. Si tenemos en cuenta que el departamento insular de Turismo tan solo cuenta con 15 inspectores dedicados a detectar la oferta ilegal, se puede considerar una cifra bastante alta desde que el Consell asumió las competencias de inspección en el pasado mes de enero.
En total se llevaron a cabo 1.651 inspecciones en Mallorca. De las cuales, 1.165 fueron a alojamientos turísticos, 791 a viviendas turísticas, 276 a intermediarios turísticos y 176 a restauración y establecimientos de entretenimiento, entre otros.
El conseller insular de Transición, Turismo y Deportes, Andreu Serra, tildó la actividad ilegal de alojamientos turísticos como «una lacra y uno de los principales problemas del sector en Mallorca». De hecho, la institución insular realizó un llamamiento a la ciudadanía para que si tienen sospechas o la certeza de la existencia de oferta turística ilegal en Mallorca, las denuncias se pueden enviar por correo electrónico al departamento de Turismo del Consell y «todas se investigan».
Las inspecciones que se realizaron: fueron: 624 en Palma, 160 en Calvià, 120 en Llucmajor, 70 en Pollença, 69 en Alcúdia, 64 en Santanyí, y 46 entre Santa Margalida y en Sóller.
