Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El Obispado pide a la Audiencia que revoque la sentencia de Sant Jeroni

El abogado del Prelado presenta el recurso contra la decisión de otorgar la propiedad del convento de Palma a la congregación de monjas

Las monjas y la Iglesia continúan discutiendo sobre la propiedad de Sant Jeroni. B. Ramon

El Obispado de Mallorca no renuncia a la propiedad del convento de Sant Jeroni, a pesar de que una sentencia dictada el pasado mes de julio determinaba que el edificio religioso era propiedad de la congregación de monjas que lo han venido habitando en los últimos cinco siglos. El Prelado ya ha presentado el recurso contra la sentencia de primera instancia. En un largo escrito, elaborado por el abogado Raimundo Zaforteza, se reclama al tribunal de la Audiencia que anule la anterior sentencia y, por tanto, el Obispado recupere de nuevo el edificio religioso, en el que en estos momentos no reside ninguna monja.

El principal argumento del recurso del abogado es que este conflicto ya fue resuelto en una demanda anterior y los tribunales se pronunciaron a favor del Obispado, al confirmar que tenía todo el derecho de inmatricular a su nombre dicho convento de clausura. El escrito del letrado hace una referencia histórica a la ley de desamortización, que permitía a la Iglesia inscribir a su nombre todos los edificios religiosos que aparecían sin propietario. Por tanto, el conflicto que desde los últimos ocho años mantiene la congregación de Las Jerónimas con el Obispado de Mallorca sigue todavía vigente, al menos, hasta que el tribunal de la Audiencia se pronuncie y dicte nueva sentencia. La presentación de este escrito pidiendo la nulidad de la sentencia que se dictó el pasado mes de julio no ha supuesto ninguna sorpresa, dado que el obispo de Mallorca, Sebastià Taltavull, ya mostró su oposición a la resolución dictada por el juez de primera instancia. El prelado manifestó su intención de recurrir la sentencia al defender que el convento de clausura era propiedad del Obispado y no de la congregación religiosa.

Cabe recordar que la Audiencia ya se pronunció en una disputa legal anterior que mantuvo la congregación de monjas con el anterior obispo. Un pleito en el que únicamente se discutía si la Iglesia podía o no inscribir a su nombre dicho inmueble. El anterior obispo, Javier Salinas, fue quien ordenó inmatricular a nombre de la Iglesia el edificio religioso, justificando esta decisión ante el fuerte rumor de que las monjas, que abandonaron el convento en el año 2014 (aunque en la actualidad siguen encargándose de su mantenimiento), pretendía vender el inmueble para convertirlo en un hotel. Sin embargo, las monjas se han comprometido a que no van a vender el convento y que estarían dispuestas a que el inmueble fuera ocupado por otra congregación, ya que en estos momentos, debido a la falta de vocaciones religiosas, no cuentan con religiosas para que puedan residir en este convento. Las Jerónimas cuentan en estos momentos con tres monjas, que son muy mayores y viven en Inca.

La congregación religiosa va a responder al recurso del Obispado y va a solicitar que se ratifique la sentencia de primera instancia, que les dio la razón y les otorgó la propiedad del convento. La abogada Pilar Rosselló no considera que se trate de un hecho que ya fue juzgado, sino que se trata de un conflicto distinto. En el primer pleito únicamente se discutía el derecho del Obispado a inmatricular a su nombre el edificio. En cambio, esta segunda demanda se centra únicamente en determinar la propiedad del convento.

Compartir el artículo

stats