La presidenta del Govern, Francina Armengol, evita hablar directamente de saturación turística -el portavoz del Ejecutivo, Iago Negueruela, optó la pasada semana por «sensación de saturación»- y apuesta ahora por seguir «aplicando medidas para minorar las externalidades negativas que tiene el turismo». Estas declaraciones están en total consonancia con las realizadas por el diputado nacional del PSOE, Pere Joan Pons, que se decanta por la idea de «gestionar el éxito», porque «gestionar la globalización y el turismo es gestionar los sueños de la gente». El portavoz de los socialistas, Alfonso Rodríguez, también dejó claro que no quieren menos turistas: igual o más.

La socialista reivindica que «seguimos apostando por un modelo económico que ha de ser diversificado pero que tiene su base en el turismo, un turismo de calidad, porque el turismo de excesos no lo queremos y por eso lo hemos regulado. Seguiremos trabajando y aplicando medidas para minorar las externalidades negativas que tiene el turismo».

Armengol insiste en que Balears es líder en muchos aspectos turísticos y lidera el crecimiento económico y la ocupación, si bien debe «hacer una reflexión conjunta como sociedad»: «¿Nuestro modelo económico presenta algunas externalidades? Sí, hace 7 años que trabajamos en reducir estas externalidades», asegura a la vez que recuerda que las islas es una de las pocas comunidades autónomas que «ha regulado el alquiler vacacional y lo ha prohibido en plurifamialiares en muchos lugares». También hace hincapié en que es la única comunidad que ha acordado una regulación de los cruceros a la baja y que aprobó una ley turística «que pone el acento en la sostenibilidad y los derechos de los trabajadores y en reducir las plazas turísticas con una moratoria clarísima».

Sistema de financiación

«Lo quiero decir muy claro: este año, precisamente, nos aportarán 670 millones de euros más que el año pasado. ¿Que tenemos que hacer uno nuevo? Sí. ¿Que lo tenemos que trabajar intensamente? Sí, pero que el que tenemos, que negoció el presidente Francesc Antich con el presidente José Luis Rodríguez Zapatero, en este momento está dando un buen resultado a Balears», defiende Armengol, aunque admite que debe renovarse.

Declara que hay un «entendimiento importante» en muchos asuntos entre el Govern balear y el Gobierno central, y que pese a tener algunas «cosas pendientes» se han «conseguido» muchas otras.