El decreto ley de contra el turismo de excesos empieza a dar resultados en Mallorca. En menos de dos meses, las autoridades han levantado hasta 90 actas por infracciones derivadas de esta normativa, y se han impuesto cierres cautelares a ocho locales de la isla. Dos de ellos están ubicados en Magaluf y se han clausurado de forma provisional por "prácticas denigrantes" contra sus trabajadoras y por "cosificar" la figura de la mujer.
En esta temporada turística, además de los dos locales cerrados por denigrar a las mujeres, en Magaluf también se han clausurado otros dos por vender bebidas alcohólicas fuera del horario permitido. Ahora, queda por ver cuántos de estos cierres serán definitivos.
Respecto a las sanciones, del total de 90 impuestas en Mallorca, 27 han sido en la localidad 'calvianera', y precisamente cuatro de ellas por prácticas denigrantes contra las mujeres. Otras ocho actas se han propuesto por exponer y publicitar bebidas alcohólicas, siete por fiestas ilegales a bordo de barcos, seis por incumplir los horarios de apertura, una por inducir al consumo de alcohol y otra por practicar 'balconing'.
Por otro lado, los cuatro establecimientos restantes se han cerrado en Playa de Palma; uno por facilitar alcohol a menores, y otros tres por venderlo fuera de horario. En el barrio también se han levantado actas derivadas de la Ley antiexcesos; cinco ya están tramitadas y otras cuatro todavía tienen que introducirse en el sistema, lo que suma un total de nueve sanciones.
Lo ha explicado el conseller de Modelo Económico, Turismo y Trabajo, Iago Negueruela, en la rueda de prensa posterior a la reunión de la Comisión para el Fomento del Civismo en las zonas turísticas. Durante el encuentro, los ayuntamientos de Palma, Calvià y Sant Antoni de Portmany han analizado los primeros resultados de la aplicación de la ley antiexcesos junto al Govern, la Delegación de Gobierno y varios representantes de las fuerzas y cuerpos de seguridad.
Aunque queda por ver cómo termina la temporada, todas las partes implicadas hicieron un balance positivo de los primeros pasos de la ley, si bien admitieron que todavía faltan mejoras: «Es obvio que seguiremos viendo imágenes que a ninguno de nosotros nos gustan, pero también es cierto que se está actuando y se están tomando las medidas para que deje de ocurrir», expresó el conseller de Turismo.
Negueruela consideró que la nueva legislación «tiene una capacidad sancionadora fuerte» y, a tenor de las cifras presentadas ayer, está demostrando tener «un impacto importante» para luchar contra los excesos. En cualquier caso, el conseller alegó que «sería injusto pretender erradicar comportamientos de hace veinte años en solo mes y medio», por lo que «el proceso de transformación no será de un día para otro».
Con todo, el titular de Turismo recordó que pese a que el decreto ley contra el turismo de excesos se aprobó hace dos años, se vio superado por las normativas de la covid y ha empezado a ser realmente efectivo esta temporada. En cualquier caso, Negueruela se mostró satisfecho por los resultados y aseguró que «se va a actuar con contundencia porque las islas ya han dicho basta a este tipo de turismo».
