Los ciudadanos están demostrando cada día más su apuesta decidida por la energía limpia, un objetivo por el que el Govern lleva trabajando mucho tiempo para conseguir la plena autonomía energética, para no depender de la Península. Los datos del primer trimestre de este año reflejan esta tendencia por esta apuesta, puesto que ya se ha logrado alcanzar el 45 % de la potencia energética que se almacenó durante todo el año pasado. Estas cifras demuestran que esta potencia de energía limpia que se ha logrado crear mediante las placas solares será mucho más elevada al final de año.

El vicepresidente del Govern, Juan Pedro Yllanes, responsable del proyecto de transformación energética, valoró ayer el éxito de esta iniciativa, sobre todo el interés que están mostrando los ciudadanos en conseguir un autoconsumo eléctrico. Ello pasa por instalar placas fotovoltaicas en los domicilios, cuya instalación cuenta con una importante ayuda del Govern. Hasta el momento, sobre todo teniendo en cuenta el alto precio que ha alcanzado la electricidad, prácticamente el 25 % de las viviendas ya cuenta con placas de energía, por lo que su factura de luz es mucho más barata. Además, la inversión económica realizada se compensa en un tiempo no superior a los cinco años.

El Govern, según explicó Yllanes, apuesta por lograr que los problemas urbanísticos que puede generar la instalación de estas placas desaparezcan.

El director general Pep Malagrava se mostró ayer muy satisfecho con los resultados de los indicadores de autoconsumo que se están consiguiendo este año, así como de la situación de las energías renovables y el aumento de los puntos de carga eléctrica para los vecinos. De momento, según Malagrava, únicamente el siete por ciento de la energía que se crea en Balears es límpia, pero existe un compromiso de que dentro de siete años esta cifra alcance el 35%.

El director general incidió en los grandes avances técnicos que se han logrado con las placas que crean energía a partir de la luz solar. Las que se instalan en estos momentos captan un 500% más de energía que las que se colocaban hace diez años. El responsable de este proyecto energético consideró básico que los ciudadanos que cuentan con estas instalaciones autoregulen la energía que gastan, por lo que es necesario que dispongan de su sistema de almacenaje.

Por otra parte, el vicepresidente Yllanes consideró que Balears debería abrir un debate sobre la necesidad de recurrir a la energía eólica. Ello pasa por instalar grandes molinos de viento que crean energía. Para poner un ejemplo, cada molino crea el doble de energía que una placa solar. El Govern pretende que Madrid estudie si se puede instalar un campo de molinos a unas 20 millas de la costa de Menorca para alcanzar la autonomía energética.