Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La falta de algunos alimentos y el alza en los precios alcanza al turismo

Los distribuidores subrayan que el encarecimiento no remitirá hasta agosto

Imagen del Buffet de un hotel.

Las empresas más vinculadas a la actividad turística, como hoteles y restaurantes, están teniendo que afrontar durante el actual inicio de la temporada con un problema adicional al de la reapertura de sus negocios, como es la falta de algunos productos de alimentación, sumado a unas subidas de precios que resultan muy difíciles de asumir, según señala el presidente de la asociación de distribuidores de las islas, Bartolomé Servera.

El primer punto que este representante empresarial pone de relieve es que no se está produciendo un problema de desabastecimiento de alimentos en las islas, de ahí que subraye la necesidad de no generar alarmismo, pero sí existe escasez de algunos productos destinados a negocios como la hotelería y la restauración, lo que puede ir en detrimento de la calidad en el servicio que se presta a sus clientes.

Pero a ello añade un elemento igualmente importante y es que «los precios que se aplican hoy puede que no tengan nada que ver con los que van a existir dentro de una semana», debido a los fuertes encarecimientos registrados en algunas referencias.

Como ejemplos, Servera señala que la citada escasez aparece en algunos tipos de carne, como el pollo o el cerdo, y de lácteos, como en el caso de la mantequilla, producto este último con una especial repercusión en el caso de la planta hotelera.

Del mismo modo, añade que existe un problema notable en la recepción de todos aquellos alimentos procedentes de Asia, con retrasos muy importantes en las entregas.

Respecto a los precios, señala que el de la mantequilla se ha duplicado, al igual que el de los huevos, mientras que el cerdo ha registrado alzas que pueden ir del 25% al 35%.

Además, se suma a las voces que apuntan a que la Semana Santa ha sido incluso mejor que lo que vaticinaban unas perspectivas que ya eran muy positivas, lo que está haciendo que la demanda generada por la hostelería y la restauración sea todavía más intensa.

«Si todo esto está pasando en Pascua, lo que nos preocupa es lo que puede suceder en los meses punta del verano», añade Servera.

El presidente de los distribuidores de las islas recuerda que la pandemia obligó a muchas empresas de alimentación a frenar su actividad durante dos años, lo que hace que esté costando recuperar la normalidad, a lo que se suman los problemas derivados de la guerra en Ucrania y de la inflación.

Compartir el artículo

stats