La ley contra el turismo de borrachera ha provocado gran malestar entre los turistas británicos que llegan a hoteles de Baleares en régimen de todo incluido. La mayoría de ellos asegura que desconocía la existencia de la normativa, pese a estar vigente desde 2020. «Esto ya no puede venderse como unas vacaciones con todo incluido, sino como media pensión o algo como el estilo», aseguran algunos que, además, insisten en que "estas normas deberían publicitarse mejor".  

El periódico Daily Mail ha sido uno de los primeros en hacerse eco de las quejas de un turista de 42 años en un hotel de una de las zonas afectadas por la normativa en Mallorca. El turista afirma que su viaje con todo incluido por 240 libras «se ha arruinado» por la limitación del alcohol a seis bebidas alcohólicas por día, tres en la comida y tres en la cena. El oficial de seguridad Jason Walker asegura sentirse «enojado» y «molesto» después de descubrir que había restricciones en su vale de bebida gratis después de aterrizar en la isla para un viaje de cumpleaños de tres noches. «Solo nos enteramos cuando nos registramos y no presupuestamos tanto dinero para este viaje porque pensábamos que toda nuestra comida y bebida estaría cubierta», sostiene Walker en el periódico británico. «Entiendo que están tratando de detener el abuso del alcohol y el comportamiento ruidoso, pero creo que esto se ha hecho sin la publicidad necesaria: a nosotros no nos informaron y no sabíamos nada sobre la nueva ley», lamenta.

Walker, de Lancashire, pide ahora a los viajeros del Reino Unido que quieran visitar las islas que revisen la letra pequeña de su todo incluido. «Las nuevas normas deben publicitarse mejor», considera. Por eso, hizo una llamada a los operadores de viajes para que brinden a los turistas más información sobre la nueva ley que pone coto al alcohol. 

Por otra parte, explicó que una vez analizada la letra pequeña y la normativa, considera que «esto ya no puede venderse como unas vacaciones con todo incluido, sino como media pensión o algo como el estilo». 

Descontento en las redes

Sin embargo, Walker no ha sido el único en pronunciarse contra la norma del Govern. Muchos turistas que también han visitado las islas han dejado sus comentarios en las redes criticando que las nuevas normas «no han sido ampliamente publicitadas» o que crean «confusión». 

Los más críticos aseguran sentirse estafados con lo que consideran "una reformulación del todo incluido" hecha sin previo aviso y que, además, les infantiliza : "Pago todo incluido para beber lo que quiero cuando quiero. Soy una jodida adulta".

El pasado mes de enero la compañía Easyjet ya advertía a todos sus potenciales clientes que tenían previsto reservar sus vacaciones en el archipiélago de las nuevas limitaciones que se iban a encontrar.