Los máximos responsables de Palma Beach, Juan Miguel Ferrer (CEO) y Pedro Marín (gerente), analizaron ayer las perspectivas de negocio y previsiones que se manejan para la inminente temporada turística 2022 en Playa de Palma. Una temporada en la que la zona ya habrá alcanzado la «nueva normalidad» tras dos años de pandemia covid.

«Ya hemos llegado a una nueva normalidad, ya que ahora mismo el 70% de la planta hotelera está abierta y en la segunda quincena de mayo, el 100 % de los hoteles de Playa de Palma estarán abiertos», pronosticó Pedro Marín.

Desde Palma Beach destacaron que pese a los dos años de pandemia por la covid-19, el destino logró mantener su liderazgo al lograr un corredor turístico junto a las hoteleras TUI y RIU, y garantizar una situación higiénica y sanitaria correcta en junio de 2020. Lo mismo sucedió en 2021, lo cual permite afrontar la actual temporada turística con optimismo.

«Dos años después del inicio de la pandemia, las previsiones son muy buenas y se acercan a las cifras alcanzadas en 2019, con una previsión de ocupación esta Semana Santa del 95 %», aseguró por su parte Juan Miguel Ferrer.

De los excesos a la calidad

Asimismo, pusieron de relieve que Palma Beach ha salido reforzada como marca turística de calidad, ya que se ha acelerado el proceso de cambio de modelo turístico, dejando atrás el estigma de la Playa de Palma como turismo de excesos. «La evolución del modelo turístico de calidad es imparable y Playa de Palma ha hecho sus deberes y ha acelerado el cambio. La pandemia ha sido un turbo para Palma Beach», sentenció Ferrer.

En esta línea, explicó que en sus sondeos a los clientes y turistas «hemos detectado nuevos clientes, un tipo de turismo que no había visitado Playa de Palma y que ahora han conocido el destino y se muestran dispuestos a repetir».

Sin embargo, a la hora de identificar las debilidades del destino, desde Palma Beach señalaron la escasez de un sector comercial de calidad. «Los visitantes echan en falta un comercio de calidad, distanciado de las pequeñas tiendas playeras y de souvenir, pues este importante sector no se ha adaptado ni ha hecho las inversiones necesarias que sí han hecho otros sectores como la hostelería y la restauración», señaló Ferrer.

Al nivel de Cannes

«Hoteles, bares y restaurantes han protagonizado un considerable esfuerzo de reconversión y modernización, con aumento de categoría de los hoteles, que sitúa nuestra planta hotelera al nivel de Cannes, Niza, Barcelona, Niza o Tel Aviv, por citar los destinos turísticos internacionales más punteros», aseguraron.

Además, los responsables de Palma Beach reclamaron mejoras en el transporte público y en la conectividad de Playa de Palma con el aeropuerto y con Palma.

También exigieron una mejora de la seguridad ciudadana y la prevención de hechos delictivos. «Los turistas se quejan de la seguridad en primera y segunda línea de playa, asociada a un deficiente alumbrado público», aseguró Ferrer, quien reclamó más policías y menos tolerancia hacia los comportamientos incívicos y los excesos.