La secretaria general del PP de Balears, Sandra Fernández, entra en núcleo duro de Feijóo y será miembro del comité ejecutivo del PP nacional. Estará junto a Margalida Prohens, que es miembro nato por ser presidenta regional y diputada en el Congreso.

Por su parte, la consellera del Consell, Raquel Sánchez, entra a formar parte de la junta directiva nacional. Un órgano del que salen el exsecretario general en tiempos de Biel Company, Toni Fuster, y el diputado Sebastià Sagreras. El resto continúan es el caso de el portavoz Toni Costa, los presidentes del PP insulares; Llorenç Galmés en el caso de Mallorca, así como diputados nacionales y senadores. En la junta directiva nacional también está la eurodiputada Rosa Estaràs.

Por la mañana destacó la intervención de Marga Prohens, la presidenta del PP de Balears. Prohens fue una de las protagonistas de la apertura del XX Congreso del PP que se celebra en Sevilla para elegir a Alberto Núñez Feijóo como su nuevo líder. Prohens, durante su intervención junto al resto de presidentes regionales del PP, aseguró que en «Balears tenemos a la alumna aventajada del sanchismo», en alusión a la presidenta del Govern Francina Armengol. Prohens, que pese a su avanzado embarazo quiso estar en Sevilla, se llevó la ovación de todos sus compañeros por el esfuerzo.

La líder del PP de las islas aprovechó su intervención para explicar a todos los dirigentes populares lo que a su juicio son «las políticas de la soberbia» que aplica el Govern de izquierdas en Balears. Empezó relatando que «acaban de imponer una moratoria turística, atacando a la propiedad privada en una comunidad donde vivimos del turismo». Acto seguido Marga Prohens anunció que «en un año y medio la vamos a derogar».

Feijóo interrumpe a Prohens

Alberto Núñez Feijóo hizo su entrada en la palacio de congresos de Sevilla, donde se celebra el congreso del PP, justo en el momento en que hablaba Marga Prohens. La aparición del gallego y nuevo líder popular provocó que Prohens tuviera que interrumpir su discurso durante unos minutos, ya que todo el auditorio vitoreaba a Feijóo.