El IB-Salut presentó ayer un plan de choque contra las listas de espera que prevé una inversión de 18 millones de euros. El objetivo es que de aquí a finales de año en los hospitales isleños se puedan realizar unas 9.202 intervenciones quirúrgicas, 155.859 consultas externas y 202.039 pruebas diagnósticas, en total 367.100 actos sanitarios. El director general del IB-Salut, Juli Fuster, explicó que antes de la pandemia había unas buenas cifras en cuanto a listas de espera pero las seis olas de la covid-19 han hecho mella. Por ello, anunció este plan de choque que irá acompañado de otro mediante convenios con la sanidad privada.

Hay que recordar que el decreto de demora, que establecía que si al cabo de 60 días un paciente no era atendido en la sanidad pública podía recurrir a la privada y pasar la factura al IB-Salut, no está en vigor. Este decreto quedó suspendido con la pandemia y ahora, según Fuster, se está a la espera de los acuerdos con la privada para volverlo a restablecer.

En enero de 2020, antes de la pandemia, había 12.056 pacientes en lista de espera quirúrgica, 641 de ellos con más de 180 días de espera y la demora media era de 76,6 días. En la actualidad hay 15.185 pacientes esperando una operación en los hospitales isleños, de los cuales 3.549 llevan más de 180 días de demora. La espera media ha aumentado hasta los 131 días.

Por lo que hace referencia a consultas externas, según el IB-Salut, en enero de 2020 había 41.352 pacientes a la espera de ser visitados por un especialista, 6.813 con más de 60 días de demora y la espera media era de 39 días. En la actualidad hay casi 60.000 personas esperando para una consulta de especialista, 19.352 esperan más de 60 días y la demora media para una consulta es de 56 días.

Juli Fuster, que compareció acompañado del director de hospitales Francesc Albertí, ha explicado que el objetivo es volver a los datos de las listas de espera de enero de 2020 y ello se llevará a cabo con un plan especial para incentivar la actividad extraordinaria de los profesionales de los hospitales públicos en horario de tarde, lo que coloquialmente se conoce como las peonadas. Cinco millones se invertirán en Son Espases para acometer 3.485 operaciones, 17.722 consultas y 172.694 pruebas diagnósticas. El hospital de Can Misses de Eivissa es el que presenta unas listas de espera más largas, según reconoció el propio Fuster. Por ello, la inversión será de 5,2 millones para acometer 1.721 operaciones, 39.627 consultas y 6.189 pruebas diagnósticas.

En Son Llàtzer la inversión será de 2,6 millones para 2.000 intervenciones quirúrgicas, 36.510 consultas y 10.862 pruebas diagnósticas. El Hospital de Manacor llegará a 1,9 millones para 898 operaciones, 26.296 consultas y 4.515 pruebas. Inca realizará 623 intervenciones quirúrgicas, 23.089 consultas y 5.298 pruebas.