El sindicato ANPE Baleares pidió ayer a la conselleria de Educación que «no olviden que de en enero hace frío», recordando que el año pasado fue una odisea en algunos centros escolares donde los alumnos «estaban congelados» al llegar a alcanzar temperaturas que rozaban los siete grados.

Y para evitar que la situación se repita, desde la entidad se recomendó ayer «poner las calefacciones desde el domingo o desde primera hora de la mañana del lunes, con el fin de impedir que los alumnos pasen frío». Además, pidió a las familias «el uso de ropa térmica para sus hijos, especialmente para los alumnos más pequeños -infantil y primaria- a causa de las heladas matinales en algunos municipios de la isla».