Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Salvador Cañís Paisajista y maestro jardinero

Salvador Canyís: "El déficit de paisajismo que hay en Mallorca es compartido por todos los colores políticos"

Paisajista y maestro jardinero, fue asesor, conservador y gestor del Catàleg d’Arbres Singulars de la CAIB, presidió la Asociación Española de Arboricultura y ahora lidera el proyecto Verdsatile, cuya base es el paisajismo mediterráneo con conciencia ética

Salvador Cañís: "Yo no habría talado los pinos de Porto Cristo"

Salvador Cañís: "Yo no habría talado los pinos de Porto Cristo" G. Bosch

Para ver este vídeo suscríbete a Diario de Mallorca o inicia sesión si ya eres suscriptor.

Salvador Cañís: "Yo no habría talado los pinos de Porto Cristo" M. Elena Vallés

Salvador Canyís ha liderado diversas actuaciones en la isla como la conservación del arbolado singular. Es autor de publicaciones y artículos, parte de ellos sobre el concepto de Slow Garden. Y ha trabajado en infinidad de proyectos: fue el paisajista de referencia del Grupo Bendinat, estuvo en la construcción del primer muro verde de Patrick Blanc en Balears (en Cala Llamp), también ha realizado colaboraciones con despachos de arquitectura, fincas privadas (como Es Fangar) o la administración. En sus proyectos prioriza la optimización de recursos y se adapta al ámbito geográfico del proyecto. Confiesa que es un seguidor de Oliver Filippi y su jardín seco. «Yo si pudiera sería Filippi las 24 horas del día. Procuro aplicar sus máximas hasta el límite que puedo. He renunciado a clientes porque me pedían jardines en los que se necesitaban muchos recursos y a mí eso me creaba un conflicto ético personal y profesional», comparte. Es socio de la Associació Balear de l’Arbre.

¿Era indispensable talar los pinos de la primera línea de Porto Cristo o hace un año los de la plaza de Selva?

Pienso que no se tenían que talar esos árboles. Hay alternativas de convivencia entre el uso de esos espacios urbanos, los árboles, los pavimentos. Hay técnicas para conseguir que esto no sea un problema, técnicas que buscan la manera en que todo pueda convivir. Lo que sucede es que suele haber un desconocimiento importante por parte de los ingenieros, los arquitectos y los políticos. Se recurre a lo fácil, que es eliminar el problema puntual sin ir al fondo del mismo, al origen, porque esto volverá a pasar en otro lugar y se actuará igual. Y nadie se para a pensar de dónde viene este problema. Puede que en ocasiones puntuales sea necesaria una tala. Puede haber componentes de riesgo, problemas en el subsuelo o que invadan instalaciones. Si eliminar ese árbol sirve para que luego no se vuelva a repetir el error, de acuerdo. Pero talar como solución estándar cuando se presenta un problema, pues no.

¿Se pide opinión a los expertos o esas talas masivas son decisiones únicamente políticas?

En una ciudad o en un pueblo tú lo que no puedes hacer es estar renovando el arbolado cada 25 años. Así como tú planificas la ciudad, has de planificar si una calle ha de tener árboles y ser consecuente. Has de diseñar y urbanizar para que los árboles puedan cohabitar con el resto de elementos. Por norma general, esto no se está haciendo. Ahora el árbol es una capa más de información en un AutoCad o un MicroStation, no se le da la importancia que tiene en relación a la problemática que puede generar después por un error de diseño. Me estoy refiriendo a la posición respecto a la fachada, respecto a la acera, el tratamiento del alcorque, qué hay debajo del subsuelo... Hay muchas cosas a tener en cuenta. Y la figura de una persona que entienda un poco de urbanismo, que entienda de ingeniería, de las problemáticas de la ciudad y además de árboles, es muy poco común. Por otra parte, si se decide que en una calle no puede haber árboles, no pasa nada, no puede haberlos en todas las calles de todas las ciudades del mundo. Hemos de empezar a asumirlo. 

En la plaza de España se ha instalado un contador de árboles que está conectado a una web que informa sobre los mismos, las especies, en qué calles están ubicados. El objetivo del Ayuntamiento de Palma es llegar a plantar diez mil árboles. ¿Cómo valora este número?

La tendencia europea y mundial de los países avanzados para las zonas verdes y el urbanismo es ahora el urban forestry (foresta urbana). En este urban forestry, a través de una serie de técnicas, se pretendería naturalizar los espacios urbanos pensando más en término cualitativos que no cuantitativos. Yo puedo sembrar mil tarongers bords o puedo sembrar cien almeces (lledoners). Dentro de diez años la superficie foliar de los cien lledoners será más grande que la de los mil naranjos. Y la capacidad de captación de CO2 será igual o mayor la de los cien árboles que la de los mil árboles. Se ha de cambiar el chip porque esto no va por unidades. Antes de que llegara este movimiento del urban forestry, parecía que había una competición sobre cuántos árboles por habitante había en cada ciudad. Y esto es erróneo. Lo que se mide es el porcentaje de superficie cubierta por árboles en una ciudad. Hemos de cambiar el discurso de la cantidad por el de la calidad. Y esto no tiene color político. Es aplicable a todas las formaciones. 

El paisajista y el maestro jardinero Salvador Canyís. GUILLEM BOSCH

¿Tratamos mejor a las papeleras que a los árboles?

El tema de los árboles es muy importante porque transforma una ciudad. No es una papelera. A nivel estatal hay una serie de ciudades en las que te has de quitar el sombrero porque lo hacen bien. Son muy pocas y te aseguro que no reciben 12 millones de visitantes al año. Son ciudades bastante modestas: Vitoria, Terrassa, Sant Cugat, Alcorcón o Gijón. En España, en general, hemos avanzado, pero aquí vamos con un retraso de diez o quince años.

Puntúe Palma. 

Suspende. Pero suspende desde hace 25 años. Y tiene un gran potencial esta ciudad como carta de presentación para 12 millones de turistas. Pero nuestro gobierno no está a la altura del nivel que tiene Palma como ciudad turística, mediterránea y con uno de los cascos más antiguos más preciosos del Mediterráneo. Hay mucho trabajo por hacer. Se están haciendo algunas cosas, se avanza, pero al mismo tiempo se están cometiendo errores sistemáticos. Podemos hacer muchos planes directores, pero si tú siembras un árbol en un vial donde pasan camiones, autobuses y donde tú necesitas que la primera rama horizontal esté a 4 ó 4,50 metros y siembras un árbol donde el tronco tiene un punto donde las ramificaciones empiezan a 2,20, estás condenado porque ese árbol ha perdido su dominancia apical y se ensanchará y las ramas horizontales generarán problemas durante muchos años.  

¿Con qué especies está sucediendo esto y dónde están sembradas? 

Esto pasa con una serie de especies, normalmente subtropicales, cuyo problema es que ya se cultivan mal. Y se da por hecho de que son así, pero esto es falso. La selección del material vegetal para toda la reposición de arbolado de una ciudad quien la ha de tutelar es el destinatario final, que es el Ayuntamiento. Tú no te puedes encontrar con un árbol de mala calidad sembrado en una acera. Es una condena. Además es importante seleccionar adecuadamente las especies y que sean de calidad. Esto te garantizará menos problemas en el futuro. Cada árbol tiene un modelo arquitectural de crecimiento. Está muy definido por los señores Hallé y Oldeman desde finales de los 70 hasta principios de los 80. Si no conoces el modelo de crecimiento de ese árbol no lo puedes cultivar bien ni lo puedes plantar bien. 

En el bosque de Bellver se retiran 700 pinos enfermos de Tomicus. ¿Es siempre necesario talar un árbol afectado por este escarabajo? 

El Tomicus es un ser vivo que está en el entorno natural y que cuando detecta árboles que están en una situación de estrés ataca sobre ellos acelerando el proceso de defunción. A un pino sano el Tomicus no va. En el entorno natural, en época de sequía, en terrenos secos y rocosos, pinos que llevan años ahí, ya afectados, el Tomicus entra. Si en un entorno urbano coges un pino y lo podas tanto que reduces en un 70% su superficie foliar, éste se queda estresado. Entonces el Tomicus lo detecta y va a por él. O hemos abierto una zanja al borde del pino y nos hemos cargado el 40% del sistema radicular, pues aquel pino también se estresa. Y el Tomicus hace su función. Si tú tienes pinos afectados por el Tomicus y los talas, les has de quitar la corteza. 

¿Por qué hay tantos pinos afectados por Tomicus en el bosque de Bellver? 

Bellver no es un bosque natural, aunque puede haber rincones menos afectados por la elevada presión humana. Ésta provoca situaciones de erosión, de compactación, que hacen que el sistema radicular de los árboles se resienta o el agua no se infiltre. Entonces los árboles entran en una situación de estrés y el Tomicus hace su trabajo. ¿Qué hemos de hacer ante esta situación? Si hacemos menos cosas en Bellver, estresaremos menos los pinos. A veces es más importante no hacer que hacer. 

¿Ve necesario plantar en esta zona los mil pinos anunciados?

Si en un pinar hay pinos, volver a plantar pinos para mí es una pérdida de tiempo y de dinero. Porque, si hay pinos, hay millones de semillas en el bosque de Bellver para que pueda haber una regeneración natural. Para mí no sería necesario replantar pinos en Bellver, al menos si hablamos de espacios de Bellver naturales. También es importante que todos los restos naturales de la tala de estos árboles, ese material triturado, se esparza por el suelo para crear un lecho que evite la erosión del mismo por la lluvia. Me consta que esto se están haciendo. Por otra parte, los troncos talados, una vez quitada la corteza, se pueden colocar como contención del terreno. Se pueden aplicar una serie de técnicas de bioingeniería en el bosque de Bellver y me consta que se hace, con el fin de conservar y regenerar. Todo esto debe hacerse junto a una ordenación de la circulación humana por dentro del bosque. Con ordenación, me refiero también a restricciones. Hay zonas por las que no se debería poder pasar.

¿Puede afectarle al bosque la construcción del nuevo parque de aventuras?

No fui a verlo mientras se estaba haciendo para no ponerme histérico. He visto vídeos y fotografías por las redes sociales. Con esto y lo que creo que sé me basta. Cuando vivía en Palma con mis hijos había ido a esta zona infantil. ¿Que tocaba ordenarla y modernizarla? Perfecto, ningún problema. Ahí no entro. Ahora bien, hay algo que se llama «Normas Tecnológicas de Jardinería y Paisajismo». En ellas hay una norma básica que se llama «Protección de los árboles en obras de construcción». Si todos los Ayuntamientos de Mallorca aplicasen todas estas normas, y sobre todo ésta cuando hacen una obra al lado de árboles, es que sería para sacar el champán y las galletas. He visto en el caso de los juegos de Bellver poner unos tableros verticales en el tronco de los árboles y atarlos por si un camión pasa no los dañe. Pero si tú alteras el terreno, lo rebajas, lo subes, lo compactas, debes hacer cumplir la normativa que he comentado antes. Si ves cambios de nivel y montículos de tierra debajo de un pino, este año no le va a pasar nada al pino, pero dentro de dos años tendrá Tomicus. Cuando aparece la palabra «empresa constructora», cuesta casarla con los árboles. Hay muchas veces un componente de prisa generalizada para hacer las cosas. Luego nos quejamos de que los árboles se nos mueren. 

¿Qué opina de la reciente creación de la Mesa del Árbol?

Hay que ver cómo se articula todo esto. ¿Tendrán más peso los integrantes del mundo de la arquitectura y el urbanismo que los que saben de árboles? A veces se busca contentar a todo el mundo con la participación ciudadana y no es eficaz. A mí lo que me entristece es que el tema de los árboles sea motivo de enfrentamiento entre formaciones políticas de ideologías diferentes. Este déficit que hay de paisajismo, arboricultura y urbanismo unido a lo verde en Mallorca es compartido por todos los colores políticos de la escena balear. 

¿Cómo se pueden contener las plagas con normativas sobre los pesticidas tan estrictas?

Pues consiguiendo que los árboles estén sanos. ¿Cómo se hace? Mejorando sus condiciones de vida. Un árbol sano es un árbol seguro. Si tú pones un árbol en un agujerito de 80 x 80 y esperas que este árbol no te genere problemas, estás apañado. Como mínimo, te reventará la acera. 

¿Cuál es el jardín público por excelencia de Mallorca?

El Jardí Botànic de Sóller tanto por reproducción de ecosistemas, como por la belleza con que lo hace. Es un jardín que comunica, conserva y hace pedagogía. 

Compartir el artículo

stats