Las grandes y medianas discotecas de Mallorca reclaman del Govern que les autorice a que su clientela pueda estar de pie mientras consume en su interior, retirando la obligación de estar sentado, y a cambio proponen que su aforo máximo se reduzca del 75% al 65% para disponer de más garantías de que no se van a producir aglomeraciones en su interior. Solo de esta forma, se advierte, estos centros de ocio nocturno van a poder reabrir sus puertas durante las fiestas navideñas.
Esta propuesta ha sido expuesta a los representantes del Ejecutivo autonómico tanto por el presidente de la asociación balear de este sector (ABONE), Miguel Pérez-Marsá, como por el gerente de la patronal CAEB, Sergio Beltrán. Este último ha mantenido esta misma semana una reunión con el conseller de Turismo, Iago Negueruela, para abordar esta cuestión y reclamar que la próxima semana se aprueben unas nuevas condiciones para permitir la reapertura de las grandes discotecas a lo largo del mes de diciembre.
Miguel Pérez-Marsá subraya que las exigencias fijadas por el Govern para autorizar la apertura en estas instalaciones están posibilitando que recuperen la actividad las de pequeño tamaño, pero hacen inviable la rentabilidad para las grandes y medianas. Sin embargo, el sector acepta que se mantengan la mayoría, como exigir el pasaporte covid o pruebas PCR a la entrada, acotar la pista de baile o hacer necesario el uso de la mascarilla mientras se baila. El problema radica en la obligación de que mientras se consume la clientela deba de permanecer sentada, ya que eso impide alcanzar el aforo permitido y, lo que es más importante, pone trabas a que los asistentes puedan socializar.
Por ello, el cambio que se está reclamando al Ejecutivo de Francina Armengol es que las personas que están en el interior de los establecimientos puedan permanecer de pie mientras consumen su bebida. El presidente de ABONE admite que también desearían poder reabrir las barras, pero este punto no se considera tan fundamental como el anterior.
A cambio, las grandes discotecas ofrecen una reducción de su aforo, de forma que en lugar del 75% autorizado en estos momentos (que en la realidad no se puede alcanzar por la exigencia de estar sentado), se aplique un 65% como garantía de que no se van a dar aglomeraciones.
Reapertura navideña
Desde ABONE y CAEB se defiende que estos cambios se aprueben la próxima semana, con la convocatoria de una Mesa del Diálogo Social que ayer todavía no se había producido. La importancia de que el citado cambio se aplique con carácter inmediato es que las discotecas necesitan recuperar cuanto antes su actividad para poner a prueba a su personal tras más de un año con el sector cerrado, de forma que se llegue a las fiestas navideñas con el correspondiente rodaje.
Sin embargo, Pérez-Marsá reconoce que es pesimista, ya que aunque percibe una mayor predisposición a negociar por parte de la conselleria de Turismo, se produce un rechazo a estas propuestas en la de Salud que lidera Patricia Gómez, en un momento en el que la transmisión del coronavirus está aumentando. Pero el presidente de ABONE insiste en que los nuevos contagios no se están produciendo en el ocio nocturno que ya ha abierto, lo que demuestra su seguridad.
