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Cerca de 300 firmas piden no segregar a los niños sordos en el transporte a La Purísima

Por primera vez este curso, los niños con necesidades especiales tendrán que ir en un autobús y los de educación ordinaria en otro distinto

Vista aérea del colegio La Purísima, en Palma. A la derecha, Sara Viñas, creadora de la iniciativa.

Unas 300 personas han firmado para pedir al Govern que los niños de educación especial y los de ordinaria puedan ir juntos en el autobús que les traslada todos los días al colegio La Purísima, en Palma.

La conselleria de Educación asume este año, por primera vez, el transporte escolar del alumnado con necesidades especiales de los centros concertados. La novedad ha afectado directamente a La Purísima, que tiene un colegio para niños sordos.

Ahora, el Govern cubre los gastos del traslado de los alumnos con necesidades especiales, pero no los de educación ordinaria, ya que a la Conselleria no le compete el transporte escolar de las escuelas concertadas. A la postre, en un colegio como La Purísima, que combina ambos tipos de enseñanza, esto supone separar a los niños sordos de los demás para llevarlos al colegio.

Sara Viñas deja a su hija cada día en la parada del autobús. Desde que empezó su primer año de escuela, la niña se sube en el mismo vehículo que todos sus compañeros, la mayoría con discapacidades auditivas, y disfruta de su camino al colegio. De hecho, se lleva haciendo así diez años para fomentar la inclusión.

Sin embargo, este año, por primera vez, Sara sube a su hija en un autocar distinto. Ahora, por la misma parada, a la misma hora, con la misma ruta y el mismo destino pasan dos autobuses diferentes. Uno recoge a los niños de educación ordinaria, y otro, contratado por la Conselleria, se lleva a los que tienen necesidades especiales. Ninguno de los dos vehículos se llena.

Una mañana, antes de partir hacia la escuela, la hija de Sara le preguntó a su madre si la separaban porque se había portado mal. Ese día, Sara decidió empezar a recoger firmas para pedir que los alumnos puedan viajar en el mismo autocar para ir y volver del colegio. Cerca de 140 personas han suscrito la petición en la plataforma Change.org, y otras 160 la han apoyado a pie de calle, en las hojas de firmas de la iniciativa.

La campaña se ha extendido a las redes sociales con un vídeo que llega a las 25.000 visualizaciones

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«No nos cabe en la cabeza que segreguen así a los niños», manifiesta la madre a este periódico: «Queremos que la Administración bloquee el número de plazas que necesita el colectivo de educación especial, y que el resto de niños paguen su cuota a quien corresponda para que puedan ir todos juntos».

La campaña también se ha extendido a las redes sociales: un vídeo en el que la madre explica el problema se ha viralizado y, en total, llega a las 25.000 visualizaciones. «Necesitamos ayuda para cambiar la discriminación en el transporte escolar», expone en la grabación que ha publicado. También ha enviado una carta a la conselleria de Educación y otra a Presidencia con el objetivo de hacerse escuchar.

Según explica Sara, el Govern alega una «incompatibilidad administrativa del servicio» y propone a las familias que contraten un autobús privado para los alumnos de educación ordinaria, lo que es «económicamente inviable», como dice la madre.

«Están culpabilizando a los niños de una decisión administrativa, y ellos no son capaces de ver las incongruencias del sistema», lamenta Sara. Con todo, la iniciativa ha recibido el apoyo del colegio La Purísima, que se ha visto sin más remedio que mantener el servicio de transporte escolar para los cuatro niños de educación ordinaria, que lo utilizan mientras no se encuentre otra alternativa.

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