Más de la mitad de los ciudadanos de Baleares, en concreto el 51%, cree que la inmigración supone un problema grave en la comunidad. Es la conclusión que se desprende de la última entrega de Quaderns Gadeso, dedicada a la opinión de la ciudadanía sobre el fenómeno migratorio.
Respecto a los extranjeros en situación irregular, el 69% de los baleares tiene una opinión negativa sobre ellos. Y además, el 72% de los que están en contra de la presencia de estas personas, piensa que la solución pasa por su expulsión inmediata.
Del 69% de encuestados que se mostró en contra de la inmigración irregular, la mitad alega que estas personas hacen un uso abusivo de los servicios públicos. El 44% cree que su presencia genera inseguridad y delincuencia, y un 6% opina que favorecen la economía sumergida. El estudio demoscópico concluye que solo un 26% de los sondeados tiene una opinión positiva sobre los ‘sin papeles’.
La serie de Quaderns Gadeso también analiza la percepción de los ciudadanos isleños sobre los inmigrantes que sí están regularizados en las islas: el 54% piensa que «son demasiados», y de estos la mayoría vuelve a alegar que saturan los servicios públicos (62%). También afirman que los inmigrantes ocupan puestos de trabajo que deberían ser de los autóctonos (34%) o que este colectivo no quieren integrarse en la sociedad (4%).
Frente a ellos, el 39% considera positivo que haya inmigrantes establecidos en Baleares. Una gran parte de estos manifiesta que los recién llegados tienen los mismos derechos que los demás ciudadanos (71%).
También señalan que los inmigrantes regularizados se dedican a trabajos que los autóctonos no quieren (17%) y que la diversidad que aportan es positiva (12%).
Por otro lado, un 59% de los ciudadanos baleares opina que las políticas de inmigración de la Unión Europea son demasiado tolerantes, mientras que el 13% cree que son correctas. El 22% piensa que son medidas confusas y el 6% alega que las leyes que regulan la entrada de los inmigrantes son demasiado duras, según el análisis realizado a partir de una muestra de 600 entrevistas.
De hecho, un 67% de los encuestados por la Fundación Gadeso asegura que la situación de esta comunidad no permite acoger a los refugiados. Por contra, un 14% reconoce que se está haciendo un gran esfuerzo por recibirlos, frente a los que opinan que los recién llegados a Baleares sufren un trato indigno (19%).
África concentra el 60% de la ayuda humanitaria del Ejecutivo autonómico
El Govern tiene proyectos en siete países africanos, entre ellos Níger, Yemen, Mali o Mozambique.
África concentra el 60% de la ayuda del Govern en acción humanitaria en post emergencia, con apoyo a proyectos en Níger, Yemen, Nigeria, Mali y Mozambique, según datos de la conselleria de Asuntos Sociales y Cooperación recogidos por Europa Press.
En los últimos cinco años se ha duplicado la aportación económica a este tipo de acciones, pasando de 250.000 a medio millón de euros anuales. Este dinero se canaliza mediante subvenciones a ONG y organismos oficiales como Acnur, entre otros.
En Níger se han impulsado actuaciones para garantizar la alimentación de menores y el bienestar de sus familias en asentamientos en Diffa; en Yemen, a través de Acnur, se han atendido necesidades de protección en zonas de residencia de desplazados internos y refugiados; en Nigeria, a través de Unicef, se han atendido casos de violencia sexual y se han creado espacios de aprendizaje y socialización. En el Congo, a través de Apotecaris Solidaris, se han articulado actuaciones para estructuras de salud en Beni; en Mali, a través de Pa i Mel, se presta apoyo a personas desplazadas en Djombolo-Kanda, entre muchas otras actuaciones.
LAS CLAVES
1. El 69% está en contra de los ‘sin papeles’
La mayoría de los que muestran su rechazo a los inmigrantes irregulares creen que la solución es la expulsión inmediata.
2. El 54% cree que hay demasiados migrantes regularizados
De ellos, la mayoría asegura que este colectivo satura los servicios públicos.
3. Un 59% considera que las leyes de inmigración son demasiado tolerantes
Solo un 13% opina que las políticas de migración de la Unión Europea son correctas, y un 22% piensa que son confusas.
