El perfil de la isla de Formentera está cambiando. Desde hace un año se puede observar que la isla se acaba, al norte, antes de lo previsto. La lengua de arena, es Trucadors, que apunta hacia el islote de s'Espalmador que parte de es Pujols Gros (el último promontorio situado al final de la playa de ses Illetes), de unos 750 metros de largo y 30 de ancho, se ha separado de Formentera. O mejor dicho, el mar ha sumergido un banco de arena creando un paso de agua de entre 15 y 20 metros de ancho.

Este fenómeno suele ser cíclico e intermitente y se conoce en Formentera a través de referencias verbales que pasan de generación en generación. En esta ocasión lo que realmente se sale de lo común es que ese paso de mar se abrió tras la borrasca 'Gloria' de enero de 2020 y se ha mantenido así durante todo ese año hasta ahora que permanece igual, tal y como se puede constatar a través de los documentos gráficos que aporta Diario de Ibiza, del mismo grupo editorial que Diario de Mallorca.

No es 'es Pas de n'Adolf'

La toponimia local denomina este paso de agua como es Pas de n'Adolf pero realmente no lo es, ya que se sitúa a unos metros más al norte.

Pascual Mayans, un pescador de es Caló retirado y conocedor de las referencias visuales y de la toponimia del perfil de las Pitiusas, que se utilizaba para navegar sin GPS, explica que el último promontorio más elevado, al norte de Formentera, se llama es Pujols Gros (justo después del restaurante Es Ministre en ses Illetes) y que es Pas de n'Adolf «está justo al ras», como se puede ver en la imagen número 1.

Pujols de es Trucadors

A lo largo de es Trucadors aparecen ciertas formaciones rocosas que se denominan Pujols Primer, Segon y hasta Tercer. Esta lengua de arena es extremadamente frágil al estar sometida a los vientos dominantes, tanto del este como del oeste, y a los cambios de las corrientes marinas.

El paso de mar que se ha abierto ahora se sitúa entre es Pujols Primer y el Segon. Pascual Mayans, que mantiene la buena memoria, recuerda que es Pas de n'Adolf «era más fácilmente inundable», y que el paso que ahora se ha abierto lo conocía «pero nunca había estado así tanto tiempo».

Calentamiento global

Los técnicos consultados coinciden en que este fenómeno «puede estar relacionado con el calentamiento global».

El geólogo mallorquín Xisco Roig, que escribió su tesis sobre determinados fenómenos geológicos que afectaron en la historia a la geografía de Formentera, señala que «la erosión es un fenómeno importante en todo el litoral de las Balears y esto es un ejemplo». «Influyen las corrientes marinas y los temporales en el mar», recalca.

Al ser preguntado sobre si este tipo de accidentes geográficos se recuperan de forma natural, es escueto y directo: «Eso es impredecible», para luego añadir, «lo que no hay que hacer es tener prisa». Roig recuerda que hace un año la borrasca 'Gloria' hizo estragos no solo en tierra, sino también debajo del mar «con lo que representó de cambio en las corrientes y en la dinámica litoral».

Acervo popular

Otro profesional en el análisis físico del territorio es el topógrafo formenterés Antoni Mayans (hijo de Pascual Mayans). Este técnico observa con preocupación, coincidiendo con la opinión del geólogo, cómo los temporales son cada vez más severos e intensos y cómo influye la fuerza el mar y del viento en la erosión natural que sufre la costa.

«Es correcto, actualmente es Trucadors, a partir de ese paso que se ha abierto, es una isla», concreta Mayans. «Pero eso no es el Pas de n'Adolf que está justo a continuación del Pujols Gros, este nuevo está un poco más al norte», certifica.

Señala que el litoral insular está en constante variación y como ejemplo pone lo ocurrido hace un año entre la playa de es Copinar y es Caló des Mort, en Migjorn, al sureste: « Hace un verano a la playa del quiosco de 'Bartolito' llegaron piedras de gran tamaño y se pasaron todo el verano con la playa llena de piedras, en cambio este verano ha entrado mucha arena». A su juicio esto se produce «por las corrientes marinas».

En cambio, como observador en su trabajo diario a pie de campo, señala que estos fenómenos podrían «considerarse como hechos puntuales». «Pero pienso que tienen que ver con el cambio climático, el calentamiento global», matiza.

Incluso tira del acervo popular para recordar que sus mayores siempre le han explicado que es Pas de n'Adolf «se va abriendo y se va cerrando y este no es es Pas de n'Adolf, con lo que estamos ante otro paso, que por ahora no tiene nombre», añadió.

Tras ver las imágenes del actual perfil de es Trucadors, el técnico observa: «Además es Pas de n'Adolf no es tan ancho como este».

Extremos en el clima

Antoni Mayans considera que el cambio climático es el factor a tener en cuenta y que más tiene que ver con este tipo de fenómenos: «Hay veces que nos confundimos con el cambio climático y lo relacionamos con más temperatura por aquello del calentamiento, pero en realidad estamos hablando de episodios de clima extremos, tanto de frío como recientemente en el centro de la Península, en Madrid, por ejemplo, o de viento con las borrascas cada vez más profundas y bajas presiones que hacen subir el nivel del mar y también sufrimos los episodios de calor extremo, eso es el calentamiento global».

Como vecino de es Caló, localidad que vive a la orilla del mar, señala que «en las marejadas de Tramontana cuando hay una baja presión las olas suben ahora cada vez más arriba del muelle», de este puerto de pescadores.

En cuanto a este nuevo paso de es Trucadors que se abrió justo después de la borrasca 'Gloria', precisa: «Está claro que desde hace un año en esa zona no ha habido aportación de arena natural, es un fenómeno que habrá que seguir, a ver cómo evoluciona, si se recupera o no».

A partir de ahora es Trucadors deberá ser observado para ver si tiene que ser considerado como una isla, como lo pueda ser s'Espalmador, que en un momento a finales del siglo XIX también estaba unida a Formentera por un banco de arena desaparecido.