- Que el turismo de borrachera que lleva años degradando Magaluf y Platja de Palma se esté abriendo paso en el Paseo Marítimo de Palma.
- La facilidad con la que los turistas británicos acceden a los globos del gas de la risa en Punta Ballena.
- Que las impactantes protestas de activistas climáticos en Ibiza no se hayan exportado todavía a Mallorca.
- El olvido y abandono que sufre el patrimonio que constituyen los refugios antiaéreos de la Guerra Civil en Palma.
- La maratoniana jornada que se vivió el sábado en los juzgados por la comparecencia de los acusados de la ‘manada alemana’.
- La alta siniestralidad que hay en la entrada del Paseo Marítimo de Palma.
