Ver más galerías relacionadas
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Catedral de Mallorca
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Manu Mielniezuk
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Manu Mielniezuk
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Manu Mielniezuk
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Miguel Vicens
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Miguel Vicens
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Miguel Vicens
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Miguel Vicens
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Catedral de Mallorca
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Catedral de Mallorca
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Manu Mielniezuk
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Catedral de Mallorca
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
B. Font
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Catedral de Mallorca
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Catedral de Mallorca
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Catedral de Mallorca
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Catedral de Mallorca
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Catedral de Mallorca
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Catedral de Mallorca
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Catedral de Mallorca
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Catedral de Mallorca
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Catedral de Mallorca
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Catedral de Mallorca
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Catedral de Mallorca
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Catedral de Mallorca
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Catedral de Mallorca
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Rosa Ferriol / Sant Joan
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Rosa Ferriol / Sant Joan
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Joan Mora / Sóller
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Joan Mora / Sóller
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Joan Mora / Sóller
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Joan Pons / Campanet
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Joan Pons / Campanet
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Joan Pons / Campanet
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Joan Pons / Campanet
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Biel Gomila / Montuïri
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Biel Gomila / Montuïri
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Biel Gomila / Montuïri
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Joan Mora / Sóller
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Biel Gomila / Montuïri
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Biel Gomila / Montuïri
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Biel Gomila / Montuïri
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Jaume Canut / Binissalem
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Jaume Canut / Binissalem
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Jaume Rigo / Cala d'Or
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Jaume Rigo / s'Alqueria Blanca
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Miquel Bosch / Pòrtol
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
DM / Parroquia de Santa Creu
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Santa Ponça
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Santa Ponça
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Santa Ponça
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Santa Ponça
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Santa Ponça
El Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.
Noticia guardada en tu perfil
Ver noticias guardadasEl Cant de la Sibi·la, el drama profético de origen medieval que se interpreta de forma tradicional en las Mises de Matines de Mallorca, y que en 2010 fue declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, volvió ayer a iluminar la Nochebuena, convirtiéndose en la pieza central de las celebraciones religiosas que se oficiaron, de las 17.00 a las 23.00 horas en 150 iglesias de la isla, con una gran solemnidad, de nuevo sin restricciones ni distancia social entre los feligreses y en muchos casos con las naves de los templos completamente abarrotadas.