El oro, uno de los activos considerados refugio en tiempos de incertidumbre, marcó este jueves un nuevo máximo histórico, por encima de los 2,225 dólares por onza, ante la perspectiva de que los tipos de interés empiecen a bajar y en un contexto de tensiones geopolíticas.

El precio del metal dorado, que subió en torno al 1% en la sesión, tocó los 2,225,5 dólares por onza a las 17:38 horas, según datos de Bloomberg, aunque posteriormente perdió fuelle y a las 18:30 horas rondaba los 2,219 dólares.

El oro había alcanzado su anterior récord la semana pasada, por encima de los 2,.220 dólares.

Los analistas han atribuido las subidas del oro a la posibilidad de que en los próximos meses se inicien las bajadas de tipos de interés y a las compras sostenidas del metal dorado por parte de buen número de bancos centrales.

También se vincula la fortaleza del oro a las tensiones geopolíticas, en concreto a la guerra de Ucrania y al conflicto entre Israel y Hamás.