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Inversión

El norte de Portugal consolida su sorpaso a Galicia empujado por el sector industrial

El PIB de la región lusa, donde las manufacturas y la energía suponen ya más del 26% de todo valor añadido, aventaja en casi 1.500 millones de euros al de la comunidad

El norte de Portugal consolida su sorpaso a Galicia empujado por el sector industrial.

Descartada Burgos ya, Citic Dicastal mantiene a Galicia y el norte de Portugal como emplazamientos posibles para la construcción de una fábrica de llantas con una inversión aproximada de 150 millones de euros. La primera gran planta en el sur de Europa de la multinacional china, dueña de la calderera porriñesa Censa desde 2011, protagoniza el enésimo ejemplo de competencia a uno y otro lado del Miño.

A pesar de las llamadas a la cooperación y el buen tono diplomático siempre que se habla de la Eurorregión y sus sinergias, ambos territorios pugnan habitualmente por proyectos como este. La mayoría de las nuevas leyes y reformas de normativas anteriores de la Xunta para captar inversiones o simplificar la tramitación administrativa miran de reojo el empuje económico del país vecino, donde el bajo coste sigue siendo un peligroso ingrediente de la productividad. De hecho, la diferencia salarial es ahora mismo, como adelantó FARO, del grupo Prensa Ibérica, hace unas semanas, la principal baza a favor de la opción portuguesa en la disquisición de Citic Dicastal.

La estrategia de reindustrialización de Portugal en la zona norte combina las nóminas low cost con suelo a precio de derribo, burocracia ágil en el arranque de los proyectos, ayudas públicas y una firme apuesta por la I+D que le ha llevado a escalar casi 40 peldaños en el Índice de Competitividad de la Unión Europea en los últimos seis años, pasando de las posición 173 en 2019 a la 135 entre un total de 234 regiones en 2022. Sus dos grandes palancas son la sofisticación empresarial (puesto 101) y la innovación (82). Galicia también sube, pero mucho menos (de la 163 a la 149) y el mejor lugar viene de la capacitación tecnológica: 55.

El norte de Portugal da el sorpaso a la economía gallega. Y no solo en el índice europeo de competitividad regional. El Producto Interior Bruto (PIB) conjunto de Alto Minho, Cávado, Ave, Área Metropolitana do Porto, Alto Támega, Támega e Sousa, Douro y Terras de Tras-os-Montes superó los 64.700 millones de euros durante 2021, un 2,3% más que el de Galicia (63.247 millones de euros), según el balance que acaba de publicar el Instituto Galego de Estatística (IGE) en el marco del Observatorio Transfronteirizo Galicia-Norte de Portugal.

El imparable crecimiento de la región norte lusa desde el fin de la recesión financiera global que metió a todo el país en una encrucijada histórica –fue el tercer estado comunitario, junto con Irlanda y Grecia, que necesitó un rescate financiero– limó la brecha de PIB con Galicia. A punto estuvo de romper la diferencia en 2019. Al igual que el resto del mundo, la aparición del COVID-19 desplomó la actividad en el norte luso. Su PIB retrocedió un 6,5% en términos de volumen, hasta los 60.600 millones de euros. El de Galicia cayó un 8,8%, situándose por primera vez por debajo de los niveles de producción de los vecinos (58.706 millones).

¿Un cambio coyuntural? No lo parece, a la vista de la evolución en 2021. Portugal fue uno de los países que más rápido se recuperaron de la pandemia. Creció el 5,5% y un 5,4% la región del norte, dos décimas más que la comunidad gallega (5,2%). La ventaja lusa ronda los 1.500 millones de euros.

A pesar de los rasgos demográficos compartidos –los dos territorios, entre otras cuestiones, tienen índices de envejecimiento altísimos y un problema grave de relevo generacional en el mercado de trabajo–, el perfil productivo es cada vez más diferente. Cuatro de cada cien euros del valor añadido bruto en 2021 en el norte de Portugal viene del sector industrial. Actividades extractivas, industria manufacturera y energía suponen el 26,1% de toda la actividad económica, unos 14.600 millones de euros, superando ya los niveles precoronavirus (14.029 millones en 2019). La inyección del sector al PIB en Galicia rondó los 9.600 millones, el 16,7% del valor añadido bruto y todavía por debajo de 2019 (9.900 millones).

Una subestación eléctrica en el norte de Portugal. FDV

Comercio, transporte y hostelería lideraron la actividad en la comunidad (22%, unos 12.660 millones de euros), mientras en el norte de Portugal rondaron el 18,9% (10.600 millones). El peso de la administración pública es ligeramente superior en Galicia (20,2% y el 18,8% en la región lusa); al igual que la construcción (6,7% frente al 5,8%). El sector primario alcanzó el 4,8% del valor añadido bruto en Galicia y únicamente el 1,6% en el norte del país vecino. 

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