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TRANSPORTE

Renfe solicita los permisos para operar en solitario en el mercado portugués

La compañía pública abandonaría su colaboración con Comboios de Portugal | Sigue los pasos del proceso de internacionalización proyectado en Francia tras romper con SCNF

Un tren Alvia de Renfe en la estación de Vigo-Guixar junto al Tren Celta de Comboios de Portugal. VÍCTOR P. CURRÁS

Cambio de rumbo en el proceso de internacionalización de Renfe. La compañía pública española ha decidido abandonar su colaboración con Comboios de Portugal y lanzarse a operar en solitario en el transporte de pasajeros en el país vecino dentro del marco de la liberalización ferroviaria.

Según un informe de la Dirección General de Desarrollo y Estrategia, la compañía presidida por Raül Blanco ha iniciado la búsqueda de “asistencia técnica en la obtención del certificado de seguridad en Portugal y la redacción de la documentación operacional”.

De esta manera se da un vuelco a la situación actual entre las dos empresas ibéricas que actualmente cuentan con el Tren Celta entre Vigo y Oporto como único trayecto internacional con dos exiguos servicios al día por sentido.

Hasta la fecha, desde la operadora pública española siempre habían mostrado su “voluntad de cooperar y no competir” con su homóloga lusa, algo que por el momento no ha llegado ni siquiera a la línea entre Lisboa y Madrid.

El objetivo es lograr cuanto antes el Certificado de Seguridad Único (CSU) que permita operar en solitario por la compleja red portuguesa y la traducción de los manuales al portugués.

Entre los otros requisitos técnicos de Infraestruturas de Portugal figuran la obsolescencia de su sistema de seguridad –Convel– la diferente tensión de la catenaria o la voluntad de no migrar al ancho internacional las vías actuales.

Esto provocaría que los trenes Avril de la serie 106 –todavía pendientes de su homologación tras finalizar las pruebas– pudieran convertirse en los primeros en circular como servicios de Alta Velocidad al otro lado del Miño.

Este paso adelante de Renfe le permitiría adelantarse a otras compañías privadas que ya han mostrado su interés en la futura línea entre Lisboa, Oporto y la frontera gallega. La hispano-italiana Iryo cuenta con el aval de la Comisión Europea para poner en marcha antes del 2029 un nuevo servicio directo desde A Coruña a la capital lusa.

Este mismo horizonte es el manejado por B-Rail –propiedad del grupo Barraqueiros– para unir Braga y Faro como primer operador privado del país. Al mismo tiempo, el proceso de renovación de material rodante de Comboios de Portugal espera por el visto bueno del Ministerio de Hacienda luso, por lo que los trenes de Talgo de rodadura desplazable serían los mejor posicionados para operar en las nuevas líneas de Alta Velocidad a partir de 2026.

Enmienda al plan anterior

El pasado 14 de febrero el Consejo de Ministros autorizaba la creación de una sociedad mercantil denominada “Renfe Proyectos Internacionales” con la que continuar con esa expansión prevista en su plan estratégico. A través de ella iniciará la “búsqueda de oportunidades internacionales y el diseño de una estructura organizativa acorde con las necesidades” para lograrlo.

La entrada en el mercado galo es un objetivo perseguido durante los últimos años, especialmente tras las ruptura de relaciones comerciales con la SNCF –que compite bajo la marca low cost Ouigo en España– y las trabas administrativas encontradas para lograr los permisos de circulación y que ya han provocado quejas del gobierno español.

En el corazón del viejo continente cuenta con el 50% del accionariado de la checa Leo Express –con licencia para operar en varios países– y en Reino Unido está en la alianza de Grand Union Trains para operar un nuevo servicio entre Londres y Gales. Completa esta expansión el pionero proyecto en Estados Unidos para unir con la Alta Velocidad Houston y Dallas, pendiente aún de la llegada de fondos estatales.

Nueva jornada de retrasos de hasta 50 minutos en el Eje Atlántico

Donde la situación del transporte ferroviario de pasajeros no cambia –o como mínimo, no mejora– es en Galicia. Los trenes del Eje Atlántico que conectan la estación de Vigo-Urzáiz y A Coruña vivieron este lunes retrasos de hasta 50 minutos en sus servicios madrugadores al producirse una nueva avería en el material rodante.

El MD 12411 con salida a las 5:35 de la mañana de la ciudad herculina estuvo 25 minutos detenido en Santiago de Compostela.

El bloqueo de una de las ruedas de los últimos coches provocó que se parara de nuevo en Padrón durante otra media hora. Desde la Asociación Media Distancia Galicia muestran su pesar ya que “dependemos del tren y esto es solucionable”.

Es por ello que han intensificado sus contactos con gobiernos de distintos niveles conscientes de que este período electoral coincide con el ecuador de las bonificaciones a este tipo de transportes. Además, animan a todos los usuarios a participar en el II Foros de Experiencia Cliente de Renfe en Galicia a celebrar en Pontevedra (22 de mayo), Santiago (29 de mayo) y Ferrol (5 de junio).

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