Cox Energy se impone en la puja por tomar el control de AbengoaEl juez encargado del concurso voluntario de acreedores de la compañía sevillana ha decidido adjudicar a Cox, especializada en desarrollar plantas solares y controlada por el empresario Enrique Riquelme, los principales activos de la energética repartidos en una treintena de filiales, imponiéndose a las ofertas presentadas por Urbas, Terramar, RCP y Ultramar.

El Tribunal Mercantil de Sevilla ha ordenado transmitir a Cox Energy las filiales productivas de Abengoa, con todos los activos y también con sus deudas. Cox se ha comprometido a mantener la actividad y todos los empleos de las unidades productivas en concurso, con una plantilla de 9.505 trabajadores. Cox Energy, con presencia con proyectos fotovoltaicos en España y Latinoamérica (especialmente en México y Chile), presentó una oferta que valoraba los activos de Abengoa en 564 millones de euros que ha acabado tumbando las propuestas rivales.

El futuro de Abengoa, antiguo gigante español de la ingeniería y las energías renovables, empieza a despejarse tras años de dificultades financieras, luchas internas y con los acreedores, operaciones de rescate fallidas por la falta de acuerdo entre Administraciones, y que acabó acogiéndose al concurso y al borde de la disolución. La operación aún está sujeta a la aprobación del Ministerio de Defensa -porque una de las filiales de Abengoa está desarrollando un proyecto para el grupo público Navantia- y de los principales acreedores financieras, entre ellos, Santander, Caixabank, BBVA y HSBC.

La oferta más "sólida" y "creíble"

"Comparativamente, se concluye que es la [oferta] más favorable al interés de los concursos, procediendo aprobarla", sentencia el tribunal, que considera que la propuesta de Cox es "suficientemente fundada, sólida, creíble y factible", frente a las diferentes "carencias" detectadas en las ofertas el resto de grupos candidatos en la puja por hacerse con el control de Abengoa, que en muchos casos incluyen condiciones y exigencias sobre créditos intragrupo y otras cuestiones que Cox no plantea.

Además del mantenimiento de todo el empleo, el Tribunal ha valorado que la oferta de Cox Energy ha hecho aportaciones económicas previas (con 2,5 millones ya inyectados y promesas de aportar hasta 15 millones más), que la compañía ha probado su solvencia y que se ha comprometido a asumir los litigios de las filiales quebradas.

“Para acreditar su solvencia, [Cox Energy] refiere la alta rotación de activos, tener un balance saneado y liquidez de 31,3 millones de euros; aporta cartas de interés como demostración de su acceso a los mercados de capitales nacionales e internacionales; el tener accionistas relevantes y solventes firmantes de una línea de financiación de 50 millones, 20 de ellos ya aportados", explica el tribunal.

Además, el juez destaca que la compañía presidida por Riquelme se compromete a "asumir litigios de las concursadas con el compromiso de abono del 50% de lo recuperado al concurso, 30% para los acreedores privilegiados y 20% para el concurso" y también implica el "el compromiso de pago de 50 millones de créditos masa de proyectos y concesiones en ejecución", según el auto del juez, informa Europa Press.