Si estás experimentando retrasos en el pago de tu salario, no eres el único. Es una preocupación constante para muchos empleados y, en general, se debe a problemas de liquidez si no se trata de un problema técnico o informático. Pero, si esta situación se vuelve habitual, tienes derecho a reclamar una indemnización.

Si los retrasos son excesivos o demasiado frecuentes, es posible solicitar la terminación del contrato laboral de manera unilateral y recibir una indemnización similar a la de un despido improcedente. Este derecho está contemplado en el artículo 50 del Estatuto de los Trabajadores.

El pago puntual de tu salario es una obligación legal, según una sentencia del Tribunal Supremo del 10 de enero de 2023. Si no se cumple esta obligación, es posible recibir una indemnización, pero es necesario presentar pruebas que demuestren la gravedad del incumplimiento de los plazos de pago. Esto implica demostrar que se trata de un comportamiento continuado y habitual, no solo un retraso esporádico.

Aunque en el pasado, el Tribunal Supremo solía estar del lado de las empresas, especialmente en casos puntuales en los que no podían cumplir con los plazos de pago estipulados, los retrasos continuados durante meses o incluso un año no tienen mucha justificación.

En sentencias anteriores, el Tribunal Supremo fallaba en contra de los trabajadores y argumentaba que cuando los retrasos eran una "práctica reiterada" y "previsible", los empleados deberían adaptarse a los problemas económicos de la compañía en ese momento. No obstante, ahora se reconoce que los empleados pueden tener derecho a una indemnización si pueden demostrar que la empresa ha incumplido de manera habitual y prolongada sus obligaciones de pago.

La justicia ha modificado su criterio respecto a los retrasos en los pagos de nóminas por parte de las empresas. Ya no se espera que los empleados se adapten a los problemas económicos de las compañías, ni se les puede exigir que soporten la demora de forma continua en el tiempo. A pesar de los problemas de liquidez o los procedimientos concursales en los que se encuentren, el pago puntual de los salarios es una obligación legal.

¿Cuánto tiempo tiene que pasar para que se considere un retraso prolongado?

Los retrasos prolongados se definen como un retraso en el abono de salarios de alrededor de 10-15 días al mes, un retraso de un mes o dos durante más de un año, o un retraso de entre 18 y 26 días en cinco o más nóminas.