La subida de los tipos de interés y, por tanto, del euríbor, la principal referencia para las hipotecas de tipo variable, empezó a afectar el año pasado a la vivienda. En el cuarto trimestre, el precio de la vivienda libre subió un 5,5% respecto al mismo periodo del año anterior, su menor alza desde el tercer trimestre de 2021 y registró un descenso del 0,8% con respecto al periodo julio-septiembre, lo que supone la primera tasa negativa desde finales de 2020. un ejercicio marcado por las medidas restrictivas por la pandemia.

En todo caso, en el conjunto del año, el precio de la vivienda subió una media del 7,4%, el noveno repunte anual consecutivo y su mayor incremento desde 2007, cuando el precio aumentó un 9,8%, según el Índice de Precios de Vivienda (IPV) del Instituto Nacional de Estadística (INE) publicado este miércoles. La subida experimentada en 2022 duplica la de 2021 (+3,7%) y es consecuencia tanto de la aceleración de los precios de la vivienda de segunda mano como de los pisos nuevos.

Nuevas y usadas

Así, el precio de la vivienda nueva subió una media del 7,9% en 2022, su mayor alza desde 2007, cuando aumentó un 11,9%. Con el incremento del año pasado, el precio de la vivienda nueva acumula nueve ejercicios de alzas. Por su parte, el precio de la vivienda usada aumentó un 7,3% en 2022, el doble que en 2021 y su mayor repunte también desde 2007, cuando creció un 8,2%. De esta forma, la vivienda usada también acumula nueve años de subidas.

La ralentización en el cuatro trimestre, que acusó las subidas de tipos, que provocó el año pasado que las hipotecas a tipo fijo nuevas alcanzaran su mayor proporción sobre el total en toda la historia, afectó a los dos tipos de vivienda. El precio de la nueva subió un 6,2% en comparación con el cuarto trimestre de 2021, nueve décimas por debajo de la tasa del tercer trimestre. Por su parte, el precio de la vivienda usada se incrementó un 5,3% en tasa interanual, tasa 2,5 puntos inferior a la del trimestre anterior.

En el periodo octubre-diciembre, la tasa interanual del precio de la vivienda libre se moderó en todas las comunidades autónomas, menos en Canarias, donde se mantuvo en el 8,1%, y en Navarra, donde subió cuatro décimas, hasta el 7,2%. Los mayores descensos de la tasa interanual se produjeron en Extremadura (-3,7 puntos), País Vasco (-2,9 puntos), Madrid (-2,7 puntos) y La Rioja (-2,7 puntos).

Mayores repuntes anuales

A cierre de 2022, las comunidades que mostraron los mayores repuntes interanuales en el precio de la vivienda libre fueron Cantabria (+8,6%) y Canarias (+8,1%) y las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla (+8% en ambos casos). Cataluña se situó en la banda baja con un alza del 5,5%. Por contra, las alzas más moderadas de precios se dieron en Extremadura (+2,8%), Castilla-La Mancha (+4%) y Castilla y León (+4,1%).

En comparación con el trimestre anterior, el precio de la vivienda nueva repuntó un 1,9%, mientras que el de las viviendas de segunda mano retrocedió un 1,4%, su mayor descenso desde el primer trimestre de 2013.

Los precios de la vivienda bajaron en el cuarto trimestre de 2022 con respecto al tercero en 14 comunidades autónomas y subieron en Navarra (+0,7%), Canarias (+0,5%) y Cantabria (+0,3%), así como en Ceuta (+1,8%) y Melilla (+0,7%). Por su parte, La Rioja fue la comunidad donde más bajaron los precios en el trimestre (-1,9%), seguida de Castilla-La Mancha y País Vasco, regiones en las que los precios disminuyeron un 1,6% entre octubre y diciembre de 2022. Catalunya se situó enter las que registraron mayores bajadas, con el -1,2%.