A pesar del criptoinvierno de los últimos meses, con desplome de la cotización de las monedas digitales y la bancarrota de algunas agencias de cambio, docenas de empresas de todo el mundo siguen invirtiendo en 'blockchain'. La tecnología de base de datos distribuida que sustenta a todo el sector está consolidando su papel como herramienta útil para las empresas, con soluciones de pago y control más rápidas y baratas. Barcelona acogerá entre el miércoles y el viernes una nueva edición de la European Blockchain Convention (EBC), que reunirá a 2.500 asistentes, el doble que el año pasado. La inversiones en el sector se mantienen. El bitcoin se ha revalorizado el 36% este año, pero mantiene un desplome de más del 50% con respecto a marzo del año pasado. En opinión de Victoria Gago, cofundadora de la European Blockchain Convention, "la devaluación de las monedas digitales y la crisis de algunas empresas ha contribuido todavía más al interés de los bancos tradicionales en la evolución de la tecnología 'blockchain' y en EBC. Bancos como JP Morgan, Santander, BBVA o HSBC han enviado a sus responsables a testear en Barcelona las oportunidades de inversión". "Barcelona es un atractivo más para los directivos, pero todos los asistentes al congreso vienen a hacer negocios. Start-ups, fondos de capital riesgo y bancos están atentos a una tecnología que permitirá en el futuro lanzar nuevos productos de inversión basados en blockchain", añade Gago. Tras el 'criptoinvierno' parece llegar la 'criptoprimavera'.
Pese al vértigo financiero generado en torno a las monedas digitales, ningún actor económico quiere quedar al margen de las oportunidades abiertas. Incluso la división 'cloud' de Google ha invertido más de 1.000 millones de dólares en nuevas empresas de desarrollo de aplicaciones 'blockchain'. Incluso a través de Coinbase, Google acepta criptomonedas como pago por el almacenamiento en la nube. Pese a que Coinbase perdió el año pasado el 85% de su valor de mercado, los expertos siguen considerando a la firma un coloso del sector, con 100.000 millones en activos para más de 100 millones de clientes en todo el mundo. Pese a ello, la firma anunció este pasado enero el despido de 950 trabajadores para afianzar la marcha de la empresa, cuya plantilla era antes del ajuste de 4.700 empleados. El objetivo es recortar los gastos operativos a un ritmo del 25% cada trimestre.
La bancarrota de FTX en noviembre de 2022 ha desatado una gran desconfianza de los inversores, especialmente microespeculadores. Y con razón. FTX fue la tercera mayor plataforma de intercambio de criptomonedas del mundo. La firma con sede en Bahamas y fundada en 2019 tenía más de un millón de usuarios, pero la emisión de su propia criptomoneda o 'token' (derecho digital) socavó sus cuentas, su prestigio y le llevó a la quiebra. Pero bitcoin es distinto. Su cotización puede subir o bajar, pero la criptomoneda ha demostrado su resiliencia a una situación coyuntural adversa. Sigue siendo un refugio, aunque poco estable, ante la inestabilidad económica de determinadas zonas.
El encuentro de expertos que se celebra esta semana en Barcelona evidencia el interés y confianza que se mantiene en torno a 'blockchain', frente a quienes intentan socavar el término. Pero la subida de los tipos de interés y la inflación ha restado tanto fuelle a las inversiones especulativas como abierto oportunidades de inversión rentable en empresas innovadoras en torno a 'blockchain'. La agenda prevista del encuentro de Barcelona, con 200 conferenciantes, muestra que uno de los polos de atención principales es cómo transmitir seguridad a la compraventa de criptomonedas, dotar de ese aire institucional que todavía debe consolidarse en torno a 'blockchain'.
Concepción de Monteverde, directora del centro de 'blockchain' y criptomonedas del banco Santander, conferenciante en el encuentro de Barcelona este año, ya preveía en 2022 la aparición de productos financieros en la banca tradicional para invertir en criptomonedas. Pero esas previsiones se truncaron ante un contexto internacional adverso y esa quiebra de empresas como FTX. En su opinión, la emisión de productos financieros específicos debía ser un movimiento general a escala internacional, pero para ello, reconocía, la cotización de bitcóin y ethereum debía tener una evolución positiva. Hasta firmas como Repsol están atentos al cambio que supone la tecnología 'blockchain'. El gigante petrolero de España está construyendo una plataforma llamada Veia Digitalis, que permite a los usuarios almacenar información privada como licencias de conducir, credenciales de seguridad y pasaportes en una billetera virtual basada en 'blockchain'. El proyecto comenzó en 2019 a través del trabajo de Repsol con el consorcio global de 'blockchain' Alastria, cuya vicepresidenta es De Monteverde.
Para la consultora Deloitte, participante en el encuentro de Barcelona, "el ecosistema 'blockchain' está evolucionando rápidamente con el desarrollo de nuevas plataformas, aplicaciones, colaboraciones y alianzas. Muchas organizaciones están explorando el valor potencial de la cadena de bloques y algunos de los grandes 'players' mundiales incluso están desarrollando sus propias soluciones". Es un pastel del que nadie quiere quedar al margen.
Aplicaciones
El principal uso que ha revelado a esta tecnología como especialmente rentable es en las transacciones financieras. Las empresas pueden crear aplicaciones que permiten transacciones, por ejemplo a través de Ethereum, para intercambiar divisas. Las pruebas realizadas reducen el tiempo de liquidación de dos días a segundos. La tecnología de bloques permite probar identidades sin necesidad de revelarlas. Los bancos centrales están impulsando pruebas piloto para crear sus propias monedas digitales. El Banco de España ha empezado una prueba limitada basada en realizar pagos 'online' de Ethereum y Polygon. Pero añade relativamente poco a los pagos realizados con Bizum, por lo que queda mucho por recorrer.
