El ejercicio 2022 acabó con un encarecimiento récord de los alimentos en el mes de diciembre, del 15,7% (cuatro décimas más que en noviembre), y un recorte de los precios de los productos energéticos del 6,9% respecto al mismo mes de 2021. Según el dato definitivo sobre el índice de precios de consumo (IPC) de diciembre, publicado este viernes por el Instituto Nacional de Estadística, el conjunto de la inflación se situó en diciembre en el 5,7% una décima menos que el dato que anticipó el INE el pasado 30 de diciembre, del 5,8%.

En particular, el mes de diciembre se mantuvieron altos los precios de los alimentos, especialmente leche, queso, huevos y aceite.

En todo caso, el año acabó con una clara tendencia a la baja de la tasa de inflación, que recortó un punto respecto a noviembre y algo más de cinco puntos respecto al máximo de julio (10,8%). 

Sin embargo, la estadística del INE también confirma el fuerte repunte de la llamada inflación subyacente, que excluye los precios más volátiles de energía y alimentos no elaborados. La inflación subyacente escaló hasta el 7%, una décima por encima de lo adelantado en diciembre y la tasa más alta en 30 años. Ello fue debido a un nuevo alza de los precios de del vestido y el calzado y de los alimentos no elaborados en el mes de diciembre. 

Este dato es indicativo de que el fuerte encarecimiento de la energía se está trasladando cada vez más a los precios de los bienes y servicios que componen el presupuesto familiar. Más del 50% de los elementos que componen el IPC anotan subidas de precios por encima del 7%.

El Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) sitúa su tasa anual en el 5,5%, más de un punto inferior a la del mes anterior. El dato corrobora que la inflación española se sitúa en el nivel más bajo de la eurozona (que marcó una media del 9,2% en diciembre), un dato que el Gobierno vincula con la eficacia de las medidas antiinflación que ha ido adoptando. Diciembre, de hecho, fue el último mes con el descuento generalizado de 20 céntimos por litro de carburante (antes de su supresión a a partir del 1 de enero), si bien aún no había empezado a aplicarse la rebaja al 0% del IVA de los alimentos que entró en vigor con el nuevo año. 

La vicepresidenta Calviño ha expresado que el efecto de la rebaja del IVA al 0% de las frutas y verduras y al 5% de productos como el aceite y la pasta se notará en los datos de la inflación a lo largo del primer semestre del año. Ha reiterado que el Gobierno está trabajando con la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) para vigilar que el recorte del IVA "se repercute plenamente en beneficio de los ciudadanos" y ha anticipado que "los datos que tenemos hasta el momento, muenstran que sí es así, más allá de los retrasos con el reetiquetaje de algunos productos que se produjeron en los primeros momentos".

El decreto de medidas antiinflación que el Consejo de Ministros aprobó el 27 de diciembre, previsiblemente se someterá a convalidación en el Congreso de los Diputados "en las últimas semanas de enero" y la vicepresidenta ha expresado que no se puede "imaginar" que alguien pueda votar en contra, en alusión directa al Partido Popular.