El consejero delegado del SabadellCésar González-Bueno, ha sacado pecho este miércoles por la evolución del banco durante los dos últimos años, en los que ha pasado de estar a punto de ser absorbido por el BBVA a ser la entidad que más se ha revalorizado en Europa en este periodo, al multiplicar por 2,3 su valor desde enero de 2021. Una evolución que, según ha recalcado, sitúa al banco "totalmente fuera de peligro de una fusión", al haber recuperado la confianza y el "reconocimiento" de clientes, reguladores e inversores, además de la propia plantilla.

Así lo ha señalado González-Bueno durante su intervención en la jornada Líderes con estrategia, que ha organizado la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) en Alicante, en colaboración con el SabadellGarrigues INFORMACIÓN. Un acto en el que ha vuelto a mostrar un "optimismo moderado" ante la situación económica, alejando el fantasma de una posible recesión.

En una charla con el director del Club INFORMACIÓN, Toni Cabot, el primer ejecutivo del Sabadell ha recordado la delicada situación que atravesaba el banco cuando él y el nuevo director financiero, Leopoldo Alvear, se incorporaron a la entidad en diciembre de 2020, tras la ruptura de las negociaciones de fusión con el BBVA. Más allá de las medidas que tomaron para reorganizar el negocio –con la división de la actividad en tres grandes áreas: particulares, empresas y banca corporativa-, González-Bueno ha señalado que la clave del vuelco que ha dado la evolución del banco fue el restablecimiento de la confianza.

"Que llegase un equipo nuevo y dijese que el banco estaba bien, que no habían encontrado nada raro, fue clave, porque había preocupación entre los analistas sobre el grado de solvencia del banco. Se preguntaban: '¿es esto otro Popular?'. Y que llegasen personas de fuera, mirasen los libros y dijeran que no, que esto no era otro Popular y que, además, era una franquicia fantástica... Simplemente con esas declaraciones ya se produjo gran parte de ese recorrido" de revalorización, ha recordado González-Bueno. Eso sí, una confianza que, según ha recalcado, más tarde el equipo del Sabadell se ha encargado de mantener trimestre a trimestre, en cada presentación de resultados.

"Ahora estamos totalmente fuera de peligro de una fusión, porque nos hemos ganado y hemos recibido el reconocimiento de clientes, reguladores y de nosotros mismos, apoyados por los inversores, que nos hemos dado la confianza de que este es un gran proyecto y que vamos a seguir adelante", ha insistido el CEO de la entidad quien, además, ha recordado lo "dolorosas" que son estas operaciones para clientes y trabajadores. Igualmente, ha considerado que el sector financiero español ya está llegando "a niveles de concentración en los que cualquier desaparición de un jugador hace daño a la competencia".

Incertidumbre

Más allá de la situación particular del banco, César González-Bueno también se ha referido a la incertidumbre económica y, como ya hiciera durante la presentación de resultados trimestrales de hace unas semanas, ha vuelto a mostrar un "optimismo moderado". Así, ha recordado que las consecuencias del covid-19 golpearon en mayor medida a España que a otros países por su mayor componente del sector servicios, frente al peso más elevado de la industria en otros estados europeos. La misma razón por la que "ahora deberíamos sufrir menos".

Frente a los agoreros que pronostican una nueva crisis, ha recordado que todos los organismos internacionales prevén para España crecimientos de entre un punto y un punto y medio por encima de la zona euro tanto este año como el próximo. "Esa ventaja nos aleja de la recesión", ha señalado. Una afirmación que también basa en los propios datos que maneja el banco en su día a día. Así, ha explicado que la concesión de créditos para circulante crece a un ritmo del 29% interanual, lo que da muestras de que la actividad de las empresas se mantiene elevada, aunque ha reconocido que la inversión a largo plazo sí se está frenando. Igualmente, ha señalado que esperaba el "Armagedón" en términos de consumo tras pasar el verano, cuando la realidad es que los pagos en los terminales de punto de venta que gestionan también suben por encima del 25%.

Y, en cualquier caso, ha defendido que España llega a este momento en una situación muy distinta a la de 2008. "Fue una crisis feroz y tardamos mucho en asimilarla, porque España era uno de los países más endeudados, tanto en particulares, como en empresas, y ahora somos uno de los países menos endeudados en el sector privado. Estamos en una situación más sólida para aguantar este golpe", ha insistido, antes de asegurar, a modo de conclusión sobre este asunto, que el panorama "está peligrosito, pero no tiene mala pinta".

Ayuda a los hipotecados

González-Bueno también se ha referido a las medidas que quiere impulsar el Gobierno para que los bancos ayuden a los colectivos más vulnerables que se vean afectados por la subida de tipos en sus hipotecas. Tras recordar que lo último que quiere un banco es quedarse con una casa, el ejecutivo ha alertado de los riesgos que implica adoptar este tipo de medidas "mediante el BOE", por los desequilibrios que puede generar.

En concreto, ha recordado que, si se generalizan las ayudas a todos los que se sitúen por debajo de determinados niveles de ingresos -o cualquier otro requisito- y eso se convierte en ley, la normativa bancaria obligará a aumentar las provisiones sobre los créditos de este tipo de clientela, lo que provocará que en el futuro tengan más difícil el acceso a la financiación. Por eso ha abogado por soluciones voluntarias y ha recordado que la mayoría de las entidades ya tienen equipos completos que se encargan de anticiparse a los problemas que puedan tener los clientes y buscar soluciones con ellos de forma individual.

Herencia de la CAM

Por otro lado, el consejero delegado del Sabadell ha valorado positivamente los cinco años que la entidad lleva instalada en Alicante, desde que decidió trasladar su domicilio por el desafío independentista. Una decisión que, como ha recordado, se debe a la enorme cuota de mercado que tiene en la provincia, donde más del 40% de los residentes son clientes del banco, y en el caso de las pymes, tres de cada cuatro tienen relación con la entidad. En este aspecto, González-Bueno ha reivindicado la "herencia" de la CAM, "que nos ha dejado una riqueza de relaciones, de formas de hacer y de personas que nos ha enriquecido muchísimo".

Así, ha insistido en que Alicante es una zona "absolutamente crítica" para el Sabadell, por lo que pesa en el negocio pero también por esa herencia de Caja Mediterráneo. Ha destacado que el banco tiene a 1.500 de sus 19.000 trabajadores en la provincia, donde también mantiene un centro de servicios corporativos y un importante centro tecnológico donde, por ejemplo, se realiza el testing de todas sus aplicaciones informáticas.

Mesa redonda

Antes de la intervención de César González-Bueno, la jornada de la APD ha acogido una mesa redonda moderada por el socio responsable de Garrigues en Alicante, Juan Antonio Pacheco, en la que han participado la Business Sales Manager de Aceitunas Cazorla, Zulema Beresaluce; el CEO del Grupo Alacant, Joaquín Lancis; el CEO de Grupo Marjal, Javier Fur; y el CEO de la tecnológica FacePhi, Javier Mira. Un encuentro en el que, entre otros aspectos, han lamentado la lentitud con la que están llegando los fondos Next Generation a las empresas privadas o la falta de ayudas para mejorar la sostenibilidad de los negocios, en contraste con el aumento de los impuestos ambientales. También se ha señalado los problemas de falta de mano de obra.

Por su parte, la bienvenida al acto ha corrido a cargo del consejero de APD Levante y presidente de Baleària, Adolfo Utor; el director territorial del Sabadell, Fernando Canós, y el socio responsable de Garrigues en la Comunidad Valenciana y Murcia, Francisco Soler.