Domestika, una plataforma de formación online con origen español, se enfrenta a una demanda por despido colectivo encubierto tras echar a la calle a decenas de trabajadores. Los afectados cifran el número de despidos en 150 en todo el mundo, de los cuales al menos 70 habrían sido en España. Preguntado por EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, el CEO de la compañía, Julio Cotorruelo, lo niega y dice que "ni mucho menos" han despedido a esa cantidad de gente y que, de hecho, tienen 40 puestos abiertos.

La mayoría de personas despedidas trabajaban en remoto y no se conocían personalmente, lo cual les dificulta el conteo, si bien aseguran que sus cifras salen del grupo de chat de despedidos que crearon al efecto. "Nos despidieron por teléfono. Mientras estaba en la llamada pude ver cómo se iban cerrando mis cuentas: Adobe, Gmail, todo", dice uno de ellos. "Los despedidos pedían a los que aún estaban dentro que recopilaran todos los teléfonos que pudieran".

Según el CEO, Domestika tiene cerca de 800 empleados "a nivel global". La matriz, Domestika INC, está en Estados Unidos desde 2010 y cuenta con "aproximadamente" catorce filiales, de las cuales dos están en España: DMSTK, constituida en 2014, y Estudios de Grabación digital, constituida en 2019.

El germen de la empresa está en un foro de diseñadores españoles sin ánimo de lucro, creado en 2004, que creció y creó una gran comunidad hasta ser absorbido en 2008 por Webactiva, la empresa de hacer páginas web que entonces dirigía Cotorruelo. El empresario compró el dominio, contrató a las personas que llevaban las riendas del proyecto y lo impulsó de forma independiente. En 2013 vendió Webactiva y se quedó solo con Domestika, explorando, entre otras vías, el negocio educativo.

DMSTK y Estudios de Grabación Digital sumaron un total de 192 empleados en 2020, de acuerdo a las cuentas depositadas en el Registro Mercantil. En ellas se observa el extraordinario crecimiento experimentado durante la pandemia, cuando la demanda de cursos por internet se disparó. Juntas, superaron los nueve millones de euros de facturación en dicho ejercicio.

Fruto de este éxito pandémico, la empresa anunció el pasado mes de enero una ronda de inversión de 110 millones de dólares (105 millones de euros) a una valoración de 1.200 millones, lo que elevó su estatus a "unicornio", el término con el que se conoce a las empresas valoradas en más de mil millones.

En España, forman parte del club de los unicornios Glovo, Jobandtalent, eDreams, Wallbox, Cabify, Idealista, Devo, Travelperk y Flywire.

"Es un ERE encubierto"

De todos los despedidos, 33 se han unido en un único caso para pedir su nulidad. Todos han presentado papeleta de conciliación y demanda, según informa la abogada defensora de la causa, Esther Coma de Colectivo Ronda Madrid.

Coma explica que es posible que la demanda aún no le haya llegado a la empresa (al pedirle su versión para este artículo, Corretuelo aseguró que Domestika no estaba demandada por nadie).

Coma esperó a formar un grupo superior a treinta personas para entrar dentro de los umbrales definidos por ley.

La legislación española exige a las empresas que tramiten un ERE (Expediente de Regulación de Empleo) cuando despidan a un determinado porcentaje de empleados en un plazo de tres meses —más de treinta trabajadores si la empresa tiene más de 300 o más del 10% de la plantilla si tiene entre cien y 300—, cosa que Domestika no ha hecho. "Al afectar a más de treinta trabajadores, es un ERE encubierto sí o sí", sostiene Coma.

Tramitar un despido colectivo implica sentarse a negociar las condiciones con los trabajadores. Es menos ágil que despedirlos uno a uno. Cotorruelo argumenta que ninguna de las dos filiales españolas ha despedido a más de treinta personas y que son empresas completamente independientes: una dedicada a la producción audiovisual de cursos y otra al desarrollo de software y marketing.

Los despedidos, algunos contratados por DMSTK y otros por Estudios de Grabación Digital, se consideraban parte del mismo grupo. "Todos los emails eran @domestika.org y todos hablábamos entre nosotros", dicen. Cuando se produjeron los despidos, el número de miembros del Slack, una herramienta de chat corporativo, bajó sustancialmente.

"Lo que aducen estos empleados es que, de facto, ambas compañías conformarían un grupo empresarial y que sumando las cifras en ambas empresas, el número sí que superaría los treinta. Esta es una posición totalmente legítima, pero igual de legítima es la de Domestika el decir y demostrar que eso no es así", añade Cotorruelo.

Despido por "ausencia laboral"

Los despidos se produjeron en marzo y fueron individuales. "A todos nos despidieron por el mismo motivo: ausencia laboral durante cuatro días. Pregunté por qué ponían eso, si era mentira, y me reconocieron que no podían poner otra cosa. Que habían crecido mucho durante la pandemia, pero que ya no tenían tanta demanda de cursos y debían reducir", añade el afectado.

Según el relato de los afectados, que escribieron un comunicado conjunto, la empresa invitaba a firmar ese despido y a ir al acto de conciliación, prometiendo reconocer indemnizaciones de 33 días por año trabajado.

"Desgraciadamente, esto es muy habitual. Las empresas le dicen a la gente que no se preocupe, que les van a dar 33 días y la mayoría de la gente firma, por lo que el asunto no trasciende", dice Coma. "Pero lo cierto es que es un despido nulo".

"Imagina que no has faltado al trabajo y la empresa te pone en una carta de despido que has faltado cuatro días", continúa la abogada. "Si ponen la verdad, que en pandemia aumentó mucho la demanda de cursos y que ya no tienen tanta, es aún más evidente. Han intentado disimular. Todo esto está hecho a conciencia. Ellos saben que si argumentan una causa económica o productiva de la empresa es necesariamente un despido por causas objetivas y que si superan cierto umbral tienen que hacer un despido colectivo. Han sido bastante burdos en la ejecución, pero más burdo hubiera sido poner que es una causa objetiva".

Coma informa de que el acto de conciliación será el 9 de mayo. "Si no se llega a un acuerdo ese día, que no creo porque es un caso complejo, se irá a juicio", concluye. "Nosotros creemos que los despidos son nulos y se les tiene que readmitir".