El atletismo balear conoció este pasado fin de semana el fallecimiento de Josefina Avilés, persona que fue clave en su momento en la Federación Balear de Atletismo

Eran momentos de transición, cuando Pep Orts había dejado la presidencia y la federación que estaba ubicada en las oficinas del polideportivo Sant Ferran pasó a la ‘Casa del Deporte’, en Alcántara Peña. 

Fue secretaria con Rafael Coll en los años 80 del siglo pasado y continuó con Miquel Pascual, Toni Oliver, Toni Gelabert y cuando fue elegido presidente su marido, Ventura Marí. 

Alrededor de 1988 dejó el atletismo y empezó a colaborar con el incipiente Deporte Escolar, para después de unas oposiciones ingresar como funcionaria del Govern balear en la Direcció General de d’Esports, organismo en el que destacó por su gran labor. A punto de jubilarse, deja una gran huella a nivel profesional, personal y humano, tanto en la Conselleria d’Afers Socials i Esports como en la Federació d’Atletisme de les Illes Balears.

Ventura Marí, su marido, pertenecía al grupo de Mateu Domínguez, Toni Bordoy o Juan José Lobo, entre otros, en unos momentos en los que quien suscribe dirigía la sección de atletismo del colegio CIDE.

En la imagen que ilustra esta noticia, Josefina Avilés aparece junto a Rafael Coll y el atleta Jordi Llopart, cuando se le recibió en el aeropuerto de Son Sant Juan el año en que conquistó el título de campeón de Europa de 50 km marcha en Praga (1978).