Después de su sensacional actuación en la pelea por la pole del Gran Premio de Mónaco, donde obligó a Verstappen a arriesgar al límite para superarle, Fernando Alonso ha encajado una decepción en el Circuit de Barcelona. El piloto asturiano no ha cometido varios errores y ha pagado cara su salida de pista al principio de la Q1, en la que ha dañado el suelo de su Aston Martin AMR23, comprometiendo su rendimiento y teniendo que conformarse con un noveno puesto en parrilla. Saldrá octavo por sanción a Gasly.

[Clasificación del Mundial de Fórmula 1]

Alonso, que ve alejarse el sueño de sumar la 33 en casa este domingo e incluso tiene difícil sumar su sexto podio de la temporada, ha reconocido su mal día: "Al final hemos tenido un sábado malo, por mi parte más que nada. Puse una rueda en la parte mojada supongo, porque se me fue el coche en la última curva y fue costoso, ya que dañamos el fondo y perdimos rendimiento para toda la clasificación", ha explicado Fernando.

"Duele un poco más porque fue en la vuelta de salida, si fuera en la vuelta rápida, pues vale, pero era en la de calentamiento. No tuvimos un buen sábado, a ver si tenemos un mejor domingo mañana", ha añadido.

Con todo el rendimiento de su coche este fin de semana le permite ser positivo dentro de lo que cabe: "Soy optimista porque creo que perdimos rendimiento en el suelo y en esta última vuelta de la Q3 volví a cometer otro error en la curva 10, me salí un poco a la parte húmeda y creo que venía para hacer un 1:12.7 que hubiese sido segundo", ha explicado Alonso.

[Calenario de la temporada de la Fórmula 1]

"Si con el coche dañado estaba para luchar por la primera línea, creo que tenemos muy buen ritmo para mañana ha terminado Alonso, que es consciente de que para aspirar a más este domingo necesita "que haya lío" y eso, obviamente, pasa por una carrera en agua: "Saliendo desde atrás, cuanto más caos haya en el carrera igual puedes pescar en río revuelto, así que si llueve mañana estaríamos contentos".