Como tantos otros jugadores nacidos en Inglaterra pero con algún vínculo familiar en tierras escocesas, Scott McTominay juega como internacional con la camiseta azul marino de Escocia: en su caso, porque su padre es originario de Helensburg, un pueblo a 40 kilómetros al oeste de Glasgow.

McTominay, nacido en Lancaster (Inglaterra) hace 26 años, viene de marcar dos goles ante Chipre, en el 3-0 con el que Escocia inició su andadura hacia la Eurocopa. Lo hizo ‘a lo Joselu’, entrando desde el banquillo y anotando en los minutos 87 y 93.

Por si su doblete fuera poco, McTominay llega al partido ante España con un currículum reciente que le convierte en doblemente peligroso: a sus prestaciones como jugador (mucho físico y buen llegador) se añade que juega en el Manchester United, el equipo que este año ya ha eliminado a dos conjunto españoles en de la Europa League. Primero, el Barça, y después el Betis. Y podría ser un tercero, si el Sevilla no lo remedia en los cuartos de final. 

Aconsejado por Ferguson y Morunho

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Formado en las categorías inferiores del United, McTominay no se decantó por jugar con Escocia hasta 2018: un año antes, le pidió tiempo a Malky Mackay, director de rendimiento de la federación escocesa. Pero tanto Alex Ferguson (escocés) como José Mourinho, su entrenador en el United en aquel momento, le dijeron que lo mejor para su carrera sería jugar con Escocia.

Así lo hizo: debutó a las órdenes de Alex McLeish hace exactamente cinco años, en un amistoso ante Costa Rica. Desde entonces, suma 37 partidos con Escocia.